La Guardia Civil ha investigado a un hombre de 59 años como presunto autor de un delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos por maltrato animal, después de que fuera sorprendido el pasado 11 de agosto por una patrulla de Pinos Puente (Granada) cuando intentaba deshacerse de su perro muerto por ahorcamiento.
Los agentes interceptaron en un control la furgoneta que conducía el investigado y tras identificarlo registraron el vehículo y encontraron en la zona de carga un perro de raza galgo sin vida, con aparentes signos de maltrato y una cuerda con un nudo corredizo alrededor del cuello que presumiblemente le provocó la muerte.
Aunque el perro carecía de microchip, el investigado reconoció que el animal era suyo desde hacía aproximadamente una semana. A partir de ahí el equipo de Policía Medioambiental del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Granada se hizo cargo del animal y puso en marcha una investigación.
Tras la necropsia del perro, un veterinario ha certificado que llevaba varias horas muerto cuando los agentes de la Guardia Civil de Pinos Puente lo encontraron y que la muerte se produjo por ahorcamiento.
Después de confirmar la muerte violenta del galgo, los investigadores del Seprona de la Guardia Civil han puesto al propietario del perro a disposición judicial por un presunto delito de maltrato animal.