Las obras de reurbanización de la Calle Palos avanzarán en su primer tramo a partir de este viernes, desde Quintero Báez hasta la Calle Arcipreste Manuel González García, con las intervenciones en ambos acerados, por petición del propio centro escolar Santa María de Gracia. El objetivo es aprovechar las vacaciones de verano y, por tanto, el cierre del centro, para llevar a cabo estos trabajos ocasionando el menor inconveniente posible.
Según ha indicado el Ayuntamiento en una nota de prensa, la parte señalada está prevista que quede terminada en septiembre, cuando los niños vuelvan a las clases.
En este sentido, el teniente alcalde de Urbanismo, Medio Ambiente y Transición Ecológica, Manuel Gómez Márquez, ha apuntado que desde el Ayuntamiento "somos conscientes de las molestias que ocasionan las obras, pero estamos intentando minimizar los inconvenientes todo lo posible".
De este modo, a partir de este viernes, aunque la calle se mantendrá abierta al tráfico, no se podrá aparcar ni realizar labores de carga y descarga en el tramo que va de Quintero Báez hasta la Calle Arcipreste Manuel González García, trasladándose la carga y descarga a la calle Ricardo Velázquez. Además, continúan los trabajos en la calzada de la Calle Padre Marchena, lo que obliga a mantener cortado el tráfico en la misma.
Asimismo, debido al avance de las obras, del 11 al 18 de julio quedarán cerrados los garajes del Edificio Parque América y Casa Colón, mientras que el parking privado Parkia-Casa Colón, se mantendrá abierto y, tanto la entrada como salida de los vehículos, se llevarán a cabo por la calle Arquitecto Monís.
La reurbanización de la calle Palos y aledaños, que comenzó el pasado mes de abril, cuenta con una inversión municipal de 1,5 millones de euros, y con ella se ganará espacio para el peatón, incorporando nuevo pavimento, arboleda y mobiliario urbano, adoptando un tratamiento de espacio público adaptado a la imagen del Casco Histórico.
Así, se trata de una actuación en una superficie de 6.540 metros cuadrados, desde Quintero Báez hasta la Casa Colón, que tendrá un impacto "muy positivo en el embellecimiento, disfrute y accesibilidad" de este entramado viario del Centro, dando continuidad estética a la trama peatonal de la Gran Vía. Además, atendiendo a una "reclamación histórica" de los residentes de la zona, se van a eliminar los adoquines que tantas molestias y contaminación acústica provocan, según ha señalado el Ayuntamiento.