La Consejería de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo ha aprobado incentivos por un valor total de 262.583,31 euros para que 22 pymes onubenses puedan realizar proyectos que mejoren su seguridad laboral.
El delegado de Empleo de la Junta en Huelva, Alberto Santana, ha destacado "la rapidez y el buen trabajo" realizado por los técnicos del Centro de Prevención de Riesgos Laborales de Huelva para que las empresas beneficiarias "reciban el primer pago del 50 por ciento del incentivo y gestionar casi el cien por cien del presupuesto".
Según indica la Junta en una nota de prensa, estas ayudas, convocadas en régimen de concurrencia competitiva, se dividen en dos líneas. Por un lado, la Línea 1 de subvenciones a pymes se destina al fomento de las inversiones en prevención de riesgos laborales que inyectará en la provincia 260.176,03 euros, y, por otro, la Línea 2 de subvenciones a pymes es para fomentar las actividades de mejora de la integración de la prevención de riesgos laborales en la empresa y dejará en Huelva una cuantía de 2.407,28 euros.
Asimismo, el delegado de Empleo ha comentado que "la mayoría de las empresas beneficiarias se encuadran en el sector agrario e industrial" al tiempo que ha explicado que todas financiarán sus proyectos "gracias a unas ayudas concedidas que van desde los 1.200 euros, las de cuantía menor, a los 15.000 euros de las mayores, llegando a cubrir, en el 75 por ciento de los proyectos, las tres cuartas partes de la inversión".
Así, entre los proyectos que se han financiado están los que contemplan inversiones dirigidas a la incorporación en las empresas de medidas de mejora preventiva, como la sustitución de maquinaria antigua existente en los centros de trabajo; la incorporación de instalaciones específicas para el control de contaminantes de naturaleza química, física o biológica; las adaptaciones de seguridad de equipos de trabajo y maquinaria; o la adquisición de sistemas inteligentes para el control activo de la protección de las personas trabajadoras, entre otras.
Para conocer el alcance de las actuaciones en materia de prevención de riesgos laborales que serán incentivados con estas ayudas, Alberto Santana se ha trasladado hasta el municipio de Hinojos para visitar la empresa Laboratorios Demoestéticos, SA (Instituto Español) dedicada a la fabricación de perfumes y cosméticos cuya plantilla está formada en su práctica totalidad por 167 mujeres.
El proyecto, que cuenta con una subvención de 15.000 euros, y que ha sido presentado al delegado de Empleo por el gerente de la empresa, Norberto Granados, comenzó de manera experimental con la subvención del año 2021, y tras sus resultados positivos, se ha decidido realizar una segunda fase con la subvención de 2022.
Así, dentro del proceso productivo, al envasar los productos almacenados en contenedores abiertos de un metro cuadrado donde se vierte en bolsas para su posterior envasado con ayuda de una bomba, las operarias puedan levantar la bolsa, que puede llegar a pesar hasta cien kilos, e ir agrupando el producto en un lugar donde la bomba pueda funcionar, evitando adoptar posturas incómodas sobre el contenedor además de soportar el peso de las misma.
Al respecto, el proyecto abordado es la adquisición de tres sistemas eléctricos de reducción de residuos para la minimización de riesgos durante la manipulación de cargas y mejora de la ergonomía, sin que sea necesaria la intervención de las trabajadoras durante este proceso. Por tanto, se conseguiría eliminar la manipulación de cargas y trastornos musculo-esqueléticos por fatiga postural en este proceso.
Igualmente, el delegado ha tenido ocasión de visitar en la localidad de Niebla las instalaciones de la empresa Bifesa SL, con 37 años de experiencia en la ejecución de aprovechamientos forestales, obras medioambientales y explotación de la madera con una plantilla cercana a los 70 trabajadores.
El proyecto, subvencionado con 15.000 euros, ha sido presentado por el gerente de la empresa, Oliver López, y pretende la mejora de las condiciones de seguridad mediante la adquisición de cabezal procesador para mecanizar las operaciones de corta, desramado, descortezado, tronzado y apilado de trozas. Gracias a la adquisición de esta maquinaria, se pretende evitar vuelcos y caída de objetos, como árboles o materiales pesados.
El cabezal, que se ha mostrado en la visita, va acoplado a una máquina giratoria de orugas que se desplazaría por el monte, mecanizando todas las actividades de corta, desrame, tronzado y posterior manipulación para apilado de madera. De esta manera se eliminan los riesgos asociados a esos trabajos. Además, este tipo de maquinaria viene certificada con el ROPS (Estructura de protección en caso de vuelco) y FOPS (Estructura de protección contra la caída de objetos), ofreciendo la correspondiente protección a los trabajadores y operarios de la madera.
