Un patrón de pesca de un barco español con base en Canarias se encuentra retenido desde el pasado 14 de julio en Nuadibú (Mauritania), bajo la acusación de haber provocado la muerte de cuatro marineros mauritanos tras una colisión entre la piragua en que navegaban y el barco pesquero.
Según ha explicado a EFE el abogado del patrón del barco, el sevillano Fernando Osuna, para su cliente -un experimentado marinero natural de Isla Cristina (Huelva)- se pide pena de prisión, sin que, como medida cautelar, se le permita moverse de un hotel, mientras que fueron liberados la treintena de tripulantes del buque.
La tripulación está formada por españoles, mauritanos, senegaleses y marroquíes, y se les acusa de ser los responsables de un siniestro en el que cuatro marineros se encuentran desaparecidos, mientras que otros dos que formaban parte del mismo grupo sobrevivieron al accidente, cuyas circunstancias no han sido precisadas y que se produjo en las aguas de la ciudad de Nuadibú, situada a 470 kilómetros al norte de Nuakchot.
La falta de dispositivos de salvamento marítimo eficaces en Mauritania y el hecho de que las piraguas utilizadas para la pesca artesanal no cuentan, en la mayoría de los casos, con medios de salvamento adecuados en caso de accidente provocó que no se rescatara a las personas desaparecidas, dadas ya por muertas.
EFE se ha puesto en contacto con el patrón del barco, retenido en un hotel, quien ha preferido no hacer declaraciones. Su abogado ha pedido "ayuda e implicación" al Gobierno español para que este asunto se solucione cuanto antes.
El barco afectado es un arrastrero congelador de 33,53 metros de eslora, que desempeña habitualmente su trabajo en aguas africanas mediante convenios de pesca entre distintos países y la Unión Europea.