La Unidad de Arritmias del Hospital Universitario Juan Ramón Jiménez de Huelva ha implantado los primeros marcapasos sin cables a dos pacientes onubenses. Este avance tecnológico, que se aplica aún en un reducido grupo de centros hospitalarios, supone una alternativa de tratamiento en personas con imposibilidad de colocación de un marcapasos convencional y en los cuales la única opción terapéutica sería la cirugía abierta conllevando un elevado riesgo por su situación previa.
El nuevo dispositivo permite su colocación de una manera mínimamente invasiva dado su reducido tamaño, una cápsula de 0,8 centímetros cúbicos de volumen y dos gramos de peso. Así, con sólo una punción en la pierna, se introduce mediante un catéter a través de la venal femoral hasta llegar al corazón y fijarse en su interior. En el lugar que queda ubicado controla los impulsos del corazón y, en el caso de que no se produzcan, emite un estímulo eléctrico que genera un latido cardíaco, ha informado el Hospital Juan Ramón Jiménez en una nota.
Para la implantación de los marcapasos convencionales se precisa sin embargo realizar una incisión en la zona pectoral del paciente dado que su volumen es mayor. Éstos constan de uno a tres cables que se introducen por las venas superiores del tórax hasta el corazón y van conectados a un generador que se aloja debajo de la piel del tórax. Son estos cables los que monitorizan el latido cardíaco para que el generador emita impulsos eléctricos cuando no se producen.
Con los marcapasos sin cable se evitan algunos riesgos asociados a los dispositivos tradicionales, como son las infecciones del sistema y otras complicaciones relacionadas con la herida quirúrgica y el deterioro a largo plazo de los electrodos. Desde el punto de vista estético, no deja cicatrices externas ni el abultamiento habitual en la región pectoral por el tamaño del generador.
Si bien, están indicados sólo en casos concretos, al no reproducir la secuencia natural de contracción por su imposibilidad de estimular y detectar la actividad de las aurículas.
El hospital es referente mundial en el implante de marcapasos mediante la estimulación del Haz de His. Con esta técnica se reproduce la secuencia natural (fisiológica) de contracción del corazón a través de su propio sistema eléctrico, lo que supone una garantía a largo plazo del mantenimiento de su fuerza de contracción. Supera por tanto con creces la estimulación directa del músculo cardíaco, aportando un plus en seguridad al tratamiento convencional.
La Unidad de Arritmias del Hospital Universitario Juan Ramón Jiménez fue pionera en estimular el Haz de His en 2001 y, desde entonces, sus especialistas han realizado numerosas publicaciones en revistas de impacto internacional, siendo los primeros en publicar, en 2005, la técnica de resincronización cardiaca con dicha estimulación a nivel mundial. Sus profesionales participan en varios proyectos de investigación con otros países y han recibido numerosos galardones por su trabajo en este campo.
Cabe recordar que la Unidad de Arritmias, integrada en el Servicio de Cardiología, cuenta con todas las técnicas más punteras al servicio de los pacientes, tanto en el ámbito de la implantación de marcapasos como en el tratamiento de las arritmias, siendo referencia en la formación de especialistas, tanto en las técnicas descritas como en la ablación de arritmias sin uso de radioscopia. El tratamiento mediante marcapasos sin cable supone desde ahora una alternativa más en los tratamientos de vanguardia que aplica esta Unidad.