El PSOE local de Jaén ha afirmado este martes que el Ayuntamiento, gobernado por José Enrique Fernández de Moya (PP), pretende subir "un 5,9 por ciento" el coste de la incineración básica que oferta el servicio municipal de crematorio "sin control ni un informe de auditoría de cuentas".
Así lo han indicado en una rueda de prensa el secretario general del PSOE de la ciudad de Jaén, Manuel Fernández Palomino, y el concejal socialista José Manuel Colmenero, quienes han precisado que, con la subida que podría aplicar el Ayuntamiento, el precio del servicio de incineración básica --que incluye servicio de sala de espera y urna básica-- se incrementará de los 593,69 euros del pasado año 2013 a un total de 628,73 euros.
Esa cifra sería, según ha indicado Colmenero, un "14 por ciento" superior a lo que cuesta ese mismo servicio --un total de 552,97 euros-- por la vía privada en la ciudad de Jaén, en la que "aproximadamente un 50 por ciento" de quienes fallecen recurren a ese servicio de incineraciones, según las cifras facilitadas por los socialistas.
Los representantes del PSOE han exigido "luz y taquígrafos" de cara a esa posible subida, porque, según ha subrayado Colmenero, ésta se hace "sin control". Al hilo de ello, ha esgrimido un informe emitido el pasado día 31 de enero por la Sección de Estudios Económicos y Financieros del Ayuntamiento ante una "solicitud para revisión de tarifas correspondiente a la concesión administrativa del tanatorio", en el que el jefe de la misma indica que "el informe remitido" en relación a una "modificación de la ordenanza fiscal reguladora del precio público por la prestación de servicios en el tanatorio y crematorio municipal" no aporta "ninguna nueva conclusión sobre la veracidad de los datos en cuanto a rendimiento del servicio, costes y contabilidad aportados por la concesionaria ni se ha realizado control alguno sobre la misma".
Ante ello, el concejal del PSOE ha aseverado que "la empresa concesionaria está obligada a someterse a la fiscalización del Ayuntamiento" y éste "está obligado a fiscalizar a la concesionaria", al hilo de lo cual ha aludido también a la Oficina de Control de Empresas Concesionarias, al que también se refiere el jefe de la Sección de Estudios Económicos y Financieros, indicando que "desconoce las funciones que tiene atribuidas" dicha oficina.
Así las cosas, el PSOE ha instado al gobierno local a "rectificar ya" dicha subida "desmesurada", y que "al menos deje las cosas como están" en relación al coste de estos servicios, así como que "la Oficina de Control emita un informe y audite las cuentas".
CRÍTICAS AL ALCALDE
"No nos dejan vivir ni tampoco nos quieren dejar morir", ha lamentado Colmenero, que ha culpado al gobierno local y, en concreto, al alcalde, de "mentir" porque "prometió no subir los impuestos y no ha dejado ni uno sin tocar", aludiendo así al IBI, "que ha subido un diez por ciento", o a la creación de tasas para participar en la Carrera de San Antón "o para casarse".
Por su parte, Fernández Palomino se ha quejado de que la subida que, según el PSOE, propone el Ayuntamiento, va "más allá de la Intervención municipal", cuyos informes, en su opinión, el alcalde "observa desde lejos como quien oye llover". Además, ha advertido de que aunque el Consejo Económico y Social (CES) local "todavía no se ha pronunciado" al respecto, esta posible subida "se pasa por el forro todos los criterios y recomendaciones" de dicho organismo.
En ese sentido, el secretario general de los socialistas de la capital --que también se ha referido a la situación del cementerio viejo de 'San Eufrasio', indicando que "se está cayendo a pedazos" por culpa de la "desidia" del alcalde--, ha aseverado que "el control público ha desaparecido de todos los servicios municipales", algo que ha tachado de "gravísimo", porque, en su opinión, ahora "más que nunca es la hora de que la transparencia llegue al Ayuntamiento".
En esa línea, y tras atribuir la comentada posible subida del coste del servicio de incineración a un deseo del Ayuntamiento de "hacer caja" y de que la haga también la propia empresa concesionaria de "un servicio público extraordinariamente sensible", Fernández Palomino ha llamado a "cerrar esa puerta de atrás en que en plena crisis se han convertido las concesiones administrativas".
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