Dos candidaturas para la Audiencia Provincial

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) debe citar en los próximos días a los magistrados jienenses Esperanza Pérez y a Rafael Morales para someterlos a una entrevista personal de cara a su candidatura para presidir la Audiencia Provincial de Jaén, un proceso que debe culminar el Pleno del CGPJ a finales de este mes de enero. Esperanza Pérez, que preside la Sección Tercera además de ser la presidenta en funciones de la Audiencia desde la renuncia de Elena Arias, asegura que ha sido el “ánimo” recibido de familiares y compañeros lo que le ha empujado a dar el paso y optar a un puesto para el que cree acreditada su trayectoria profesional. No en vano lleva casi 34 años en la carrera judicial, de los que 27 han sido como magistrada destinada en audiencias provinciales, primero en la de Alicante y después en la de Jaén donde llegó en 2002. Esperanza Pérez, natural de Villacarrillo, valora el “buen funcionamiento” de las dos secciones Penales de la Audiencia, donde los retrasos son inapreciables y los señalamientos apenas van más allá de un mes. Pero reconoce los retrasos y la elevada litigiosidad en la sección Civil por el impacto de todo lo vinculado con las cláusulas suelo. Pérez considera necesaria la creación de nuevas plazas de magistrados para suplir estas carencias, una situación que, dice, también se da en los Juzgados de lo Penal. Por eso cree necesario un nuevo Juzgado para ejecutorias, otro de lo Contencioso y liberar la actual carga de trabajo del Juzgado de Familia número 6. Esperanza Pérez no oculta la necesidad de una Ciudad de la Justicia en Jaén, aunque considera que en el actual escenario presupuestario de las Administraciones “es un proyecto muy difícil de acometer”. Cree, por tanto, que “la actual dispersión de los órganos judiciales urge afrontarla con otras alternativas menos costosas”. Esperanza Pérez comenzó su carrera judicial en 1984 como responsable del Juzgado de distrito de Baeza, desde donde daría el salto a Bilbao y más tarde a Alicante. En 2002 regresó a Jaén para ocupar plaza en la Sección Primera de Civil y Penal de la Audiencia de Jaén y desde 2014 es magistrada de la Sección Tercera. Esperanza Pérez está en posesión de varias distinciones, entre ellas la Cruz Distinguida de Primera Clase de la Orden de San Raimundo de Peñafort. Rafael Morales El magistrado Rafael Morales (Loja, Granada, 1961) es el otro candidato a presidir la Audiencia Provincial, un órgano en el que permanece desde 2004 aunque antes, desde 1982 y a excepción de un paréntesis de tres años, ha desempeñado toda su carrera judicial en la provincia de Jaén. Morales, magistrado de la Sección Primera de la Audiencia, dice que no podía dejar pasar esta oportunidad. “Es un hito profesional que no pasa todos los día por tu puerta y que me permitiría completar mi carrera”, asegura. Rafael Morales ofrece una visión de la Justicia en la provincia “bastante satisfactoria”, aunque admite las carencias en cuanto a la litigiosidad civil, principalmente por la saturación derivada de las cláusulas suelo y los contratos hipotecarios. También alude a la doble carga de trabajo existente en el Juzgado de Familia número 6, algo que espera pueda paliarse una vez que entre en servicio, en noviembre, el nuevo Juzgado número 7. “El enorme esfuerzo que están realizando jueces y funcionarios están supliendo estas carencias”, indica Rafael Morales, que demanda también un nuevo Juzgado para ejecutorias en la sección Penal. Pero a la hora de reivindicar, Rafael Morales tiene claro que la construcción de la Ciudad de la Justicia es la gran asignatura pendiente. “Es un proyecto fundamental, muy necesario y urgente, no podemos seguir poniendo parches y dispersando los órganos judiciales”, indica este juez granadino que ya se considera “un jienense más”. Apunta Morales que sólo Sevilla, Huelva y Jaén carecen de una Ciudad de la Justicia, un proyecto , recuerda, que él ya reivindicó durante su etapa como decano de los jueces de Jaén, entre 1999 y 2005. Rafael Morales ha sido en dos ocasiones miembro electo de la sala de gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). Y de su etapa como decano de los jueces resalta el impulso que se dio a proyectos como el Servicio Común de Notificaciones, el equipo técnico de familia, los puntos de encuentro familiar, la división de jurisdicciones o la unificación de la sede de los juzgados de lo Penal. Entre sus muchos reconocimientos destaca la Cruz de San Raimundo de Peñafort.