Primer día de julio y primera jornada oficial de rebajas, a pesar de que la apertura de los negocios durante la desescalada fue de la mano de descuentos para animar las compras a un ‘nuevo consumidor’, acostumbrado ya a utilizar gel hidroalcohólico antes de entrar, respetar el uso de probadores y la distancia de seguridad, según el aforo del comercio.
La alarma sanitaria y la crisis económica derivada del Covid-19 han desplomado el presupuesto y la previsión de gasto en las rebajas de los jiennenses, que gastarán 49 euros, por debajo de la media andaluza, que se sitúa en 49,62 euros. A nivel regional, el presupuesto se desploma en un porcentaje superior al 11%. Así se desprende del informe elaborado por la Unión de Consumidores de Andalucía (UCAUCE). En este sentido, si la previsión de gasto del pasado año 2019 superaba los 55 euros, en este 2020, a duras penas llegará a los 50 euros.
“En este declive de las rebajas hay que tomar también en consideración que la proliferación de campañas de descuentos adelantadas y dispersas hace que los consumidores confíen cada vez menos en las rebajas”, apuntan desde la UCAUCE.
Por provincias Málaga (58 euros) y Almería (54 euros) son las que más prevén gastar, mientras que Cádiz (42 euros) y Huelva (44 euros) son las que estiman menos gastos en rebajas.
Desde la Federación ‘Comercio Jaén’ señalan que el periodo tradicional de rebajas de verano “supone una oportunidad para los comerciantes de recuperar parte de las inversiones realizadas en la compra de productos de temporada primavera-verano, las cuales no se han materializado en ventas en los últimos meses como consecuencia de la paralización de la actividad comercial con motivo de la pandemia”.
Mantienen que en “un escenario en el que las compras se han limitado, entre otras razones, por la reducción de la confianza del consumidor, se observa con incertidumbre su comportamiento al haber sido éste reeducado con motivo del confinamiento”. A estas circunstancias se unen “la incertidumbre económica y sanitaria”, recalcan.
Reconocen que esta situación hace que no tengan previsión alguna sobre ventas en rebajas. Y es que la confianza del consumidor ha bajado y a ello se une la confusión inicial provocada por los ministerios de Sanidad y Comercio, al prohibir primero las rebajas, después sólo permitir los descuentos online y más tarde autorizarlas para todos los formatos de venta.
Sí prevén “importantes descuentos”, dada la “cantidad de género que los establecimientos han acumulado durante el periodo en el que han permanecido cerrados por el confinamiento”. Señalan que pueden convertirse en unas “rebajas muy interesantes para los consumidores”.
Por otro lado, reclaman, nuevamente, una vuelta a la regulación de los periodos de rebajas, suprimidos en el año 2012. “Ello permitirá volver a competir en esta materia en igualdad a pequeños, medianos y grandes comerciantes”, aseguran.
Los negocios del centro ofrecen una experiencia de compras entre algodones. La junta directiva del Movimiento Empresarial MÜY Jaén puso en marcha a mediados de mayo una campaña de promoción del comercio local del centro urbano, presentando un “nuevo modelo de negocio más seguros y protegidos”, ante las restricciones impuestas por la pandemia.
La campaña ‘Ganas de Centro’, bajo el eslogan ‘Estarás entre algodones’, espera respuesta en ventas durante las rebajas, en una época estival que nunca ha sido buena para el comercio.
Por sectores de gasto, el textil sigue estando a la cabeza, y representará más del 60% del gasto previsto, seguido por el calzado y los complementos con un 15%. Los comercios de textil han perdido las ventas de primavera, las más fuertes. Las compras para el hogar representan el restante 15% del gasto previsto.
Las rebajas durarán hasta el 31 de agosto y el mayor volumen de ventas se concentra durante las dos primeras semanas.