Ambas partes han cedido respecto a sus pretensiones iniciales sobre la composición de equipos de trabajo
Merced a este acuerdo, el primer barco que arribará, y descargará, en la nueva terminal será el 'Cosco Oceanía' el próximo martes. Sin embargo, la escala que se iba a producir el lunes no pudo recuperarse a tiempo.
El presidente y consejero delegado de TTI-A, Fernando González, avanzó que Hanjin tiene previsto optar a la Fase B de Isla Verde Exterior y que el objetivo conjunto es que el Puerto pueda alcanzar los 6 millones de TEU's en 2015.
Jornada decisiva
La Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA) ha desempeñado un papel trascendente como mediador del conflicto en la persona de su presidente, Manuel Morón. De hecho, este principio de acuerdo debe ser validado esta misma mañana en una reunión en la que Morón convocará a TTI-A y Marapié.
Debido a este giro en los acontecimientos, la APBA desconvocó el consejo de administración extraordinario que tenía previsto celebrar también esta mañana, a la espera de que los buenos augurios se completen con un acuerdo final.
La propia APBA agradecía anoche a las partes “la compresión demostrada por la situación así como su intención de alcanzar un acuerdo definitivo”.
TTI-A
TTI-A declinó hacer una valoración de las perspectivas abiertas ayer hasta que éstas no tengan una concreción definitiva. De hecho, la filial española de Hanjin entiende que no debe pronunciarse “hasta que el inversor no tenga pleno conocimiento” de lo acontecido en la ajetreada jornada de ayer.
Con todo, TTI-A sí valora como “positivo” el principio de acuerdo, a la par que la compañía se muestra “optimista” ante la posibilidad de sellar el final de las disensiones con los estibadores.
Respecto a una posible vuelta de los barcos que fueron desviados a otros puertos del Mediterráneo desde su inicial escala en Algeciras la próxima semana, la compañía no quiso entrar a valorar este regreso. Lo que sí se aclaró es que “habrá que tener garantías” primero para empezar a pensar en recuperar estas escalas.
Marapié
El presidente del comité de empresa de Marapié, Carlos Mejías, indicó anoche que “hay principio de acuerdo pendiente de ultimar y cerrar. Si hubiera sido por nosotros, nos hubiésemos quedado hasta la hora que fuera para poder completar el acuerdo. Pero en Corea ya estaban durmiendo, con lo que tendemos que esperar a mañana por la mañana (por hoy)”.
Mejías reconoció, como también lo hizo la propia TTI-A, que se habían producido esfuerzos por ambas partes para lograr acercar unas posturas que a principio del día parecían notablemente alejadas. Unos esfuerzos que habían cristalizado en que la cifra final de personal que compondrá los equipos de trabajo en la terminal se situará entre los dos planteamientos iniciales.
El presidente del comité de empresa de Marapié declaró que “esta mañana (por ayer) tuvimos una reunión de comité de empresa, con la presencia del secretario general del sindicato Coordinadora. Luego nos fuimos a la APBA para mantener reuniones. Allí, con la mediación de Morón, hemos conseguido un preacuerdo verbal que deberá ser refrendado”.
Mejías también se mostró especialmente crítico con los “medios de comunicación que decían que nos cargábamos el Puerto y que nos han puesto a la sociedad en contra. A todos aquellos que nos llamaban locos, tenemos que decirles que posiblemente tengamos acuerdo ahora”.
Dura jornada
Si bien la jornada de ayer se cerró con un escenario bastante optimista nada hacía presagiar horas antes el último giro que dieron las negociaciones y que propició este renacer de las esperanzas por superar la situación.
Así, el día comenzó con un áspero comunicado de prensa de la empresa tras la marcha del Hanjin Casablanca “sin poder operar la descarga de sus contenedores debido al inesperado rechazo por parte de los estibadores”. Un hecho que provocó “enormes pérdidas económicas, poniendo en grave riesgo el futuro funcionamiento de la terminal”, según confirmó TTI-A.
Así, la compañía aseguraba que uno de los factores “para incrementar la competitividad del Puerto pasaba por la renovación del modelo obsoleto de operación, lo cual suponía una disminución de mano de obra”. Una disminución que, recalcaba, era conocida y aceptada por los trabajadores de la estiba.
En esta línea, la filial de Hanjin censuraba que, “en un incumplimiento manifiesto del acuerdo anterior, Marapié pretende obligar a TTI-A, cuyo modelo de funcionamiento ha sido diseñado con un ratio medio anual de trabajadores por mano de 9,88, a aceptar su petición poco realista de utilizar para el mismo concepto operativo 16,5 personas. El mismo número de trabajadores existentes en terminales de contenedores convencionales ya existentes”. Una petición que había logrado “confundir” a TTI-A, que acusó a Marapié de “utilizar el buque atracado como su medida de presión”.
Por ello, desde Hanjin se mantenía que “esta situación plantea dudas sobre la competitividad del Puerto Bahía de Algeciras y su entorno, la cual se iba a ver favorecida por la apertura de la nueva terminal”.
Es más, la compañía apuntaba directamente contra Marapié al subrayar que “la principal causa de esta situación es la dirección equivocada del comité de empresa representante del sindicato, que lucha por obtener la hegemonía de cara a las nuevas elecciones que se celebrarán el próximo 25 de mayo. Tanto el Comité como sus miembros deberían responder a la pregunta fundamental de quién se atreverá ahora a considerar invertir en este país y en esta región, si se traiciona la confianza de una compañía extranjera que confió en la promesa de la sociedad local y del sindicato”.
Por último, TTI-A advertía en su comunicado que, “a menos que el sindicato reconsidere su posición antes del buque que tiene prevista su escala el próximo lunes 3 de mayo, los buques y los inversores, incluyendo nuestro futuro, desviarán sus rutas al puerto competidor”.
Poco después se anunció el desvió del buque de la naviera china Cosco, que tenía previsto escalar en TTI-A el próximo lunes, a otro puerto del Mediterráneo así como el que iba a arribar el martes perteneciente a la misma línea que cubre el Hanjin Casablanca y que no se pudo completar.
Por su parte, Marapié decidió a media mañana presentar una “última oferta”, rebajando sus pretensiones iniciales, para lograr desbloquear el conflicto. Eso sí, los estibadores confirmaron que esa iba a ser la última propuesta que iban a presentar.
Tras este movimiento, se sucedieron los contactos para tratar de dar retomar la senda de las conversaciones para superar las diferencias.
Gobierno andaluz
El Gobierno andaluz solicitó ayer públicamente una resolución del conflicto y mostró su su “apoyo pleno y total” a Hanjin. Así, la consejera de Obras Públicas y Vivienda, Rosa Aguilar, pidió a “la Coordinadora de estibadores del Puerto Bahía de Algeciras un ejercicio de responsabilidad ante el conflicto que mantienen y que imposibilita la descarga del buque de la empresa Hanjin”.
Según Aguilar, la Junta de Andalucía ejerció una labor de mediación entre las dos partes implicadas porque “nos estamos jugando mucho”. Asimismo, Aguilar recomendó a Coordinadora que hiciera “un ejercicio de responsabilidad y cerrará el conflicto al menos hasta el verano”.
Esto permitiría, según la consejera, que en estos tres meses se pudiera evaluar las necesidades de puestos de trabajo, turnos y demás aspectos laborales que se generarán con la implantación de Hanjin, aspectos que se introducirían en el nuevo convenio colectivo.
En esta línea, el subdelegado de Gobierno de la Junta en el Campo de Gibraltar, Rafael España, mostró su “profunda inquietud y preocupación” a la par que remarcó que “resulta prioritario llevar a cabo un ejercicio de responsabilidad”.
