Los vecinos de la urbanización Royal Golf, ubicada junto a la Laguna de Torrox, llevan tres días sometidos por una impresionante plaga de moscas que les ha obligado a vivir con puertas y ventanas cerradas para evitar la invasión de los insectos, que se han adueñado, literalmente, de sus patios y zonas de jardín.
Los residentes, que han compartido imágenes y vídeos para que se pueda comprobar la dimensión de la plaga, han llamado al Ayuntamiento para que el área de Medio Ambiente localice el foco y pueda intervenir, ya que, de momento, las únicas soluciones que pueden poner en práctica son meramente caseras, desde la instalación de mosquiteras o raquetas de electrificación, hasta las trampas caseras que algunos están consultando a través de Youtube, como instalar vasos con azúcar y miel para concentrarlas y poder acabar con ellas.
Vanesa Castilla, representante de la comunidad vecinal, asegura que es la primera vez que pasan por esta situación y manejan varias hipótesis acerca del origen que ha causado el problema, aunque, por encima de todo, lo que piden es que se intervenga. "Durante algunos días nos han llegado olores como si se estuviera abonando con Purina por aquí cerca, que es algo que está prohibido a menos de tres kilómetros de una zona residencial, pero no tenemos de certeza de que pueda ser eso. Otros vecinos dicen que están vaciando los lagos del campo de golf, pero no sabemos si eso influye, o el estado actual de la laguna".
Desde el Ayuntamiento han acudido ya a fumigar contra los mosquitos, "y hay lo normal de todos los años", y lo que está descartado es que se pueda fumigar a nivel aéreo. En este sentido, fuentes municipales aseguran que desde este mismo viernes, el delegado municipal de Medio Ambiente, Jaime Espinar, lleva trabajando en el asunto junto con técnicos municipales, de la Junta y empresas de plagas, para dar una solución. De hecho, este sábado por la mañana ya se encuentran en la zona en contacto con los propios vecinos para valorar cómo actuar. La clave, como ya apuntaban los residentes afectados, pasa por localizar el foco principal del que proceden las moscas.
En el transcurso de las últimas 24 horas los técnicos municipales han seguido buscando el foco aunque sin éxito, al tiempo que se ha descartado por completo, en consenso con los vecinos, la opción de fumigar desde el aire, con todo lo que supone echar desde arriba producto químico.
A partir de este lunes, y mientras se sigue buscando el foco, el Ayuntamiento va a repartir entre los vecinos material para poder atrapar y hacer frente a las moscas en sus domicilios.
"Desde las cuatro de la tarde es imposible salir a la calle. Al menos por la noche nos dejan tranquilos", comenta Vanesa, que relata asimismo que hay vecinas que tienen hasta picaduras de las moscas cuando han salido a los patios a enfrentarse a ellas con veneno o para limpiar las que hay amontonadas en los muebles de exterior de sus casas.
La representante vecinal tiene constancia de que en la barriada El Portal también están apareciendo moscas, por lo que el foco tiene que estar en un área próxima a ambas zonas. "Es horrible. Así no se puede vivir y no sabemos cuánto puede durar esta situación".
