La Hermandad del Resucitado no sabe a ciencia cierta desde qué templo hará su salida procesional esta próxima Semana Santa, ya que su intención es abandonar la Catedral lo antes posible.
El hermano mayor de la corporación, Álvaro Barba, admite que la cofradía está “estancada” y que necesita un giro que pasaría fundamentalmente por el cambio de sede. “Nuestro deseo inmediato es abandonar la Catedral porque aquello está en plan museo, se nos queda muy grande y no podemos tener cultos. No tenemos vida”, reconoció este martes en el programa ‘Luz de Pasión’, que se emite semanalmente en 7 TV Jerez.
Sin embargo, la misión no parece sencilla. La hermandad ha tratado de establecerse en la iglesia de San Francisco, pero la semana pasada recibió la negativa de la orden franciscana, que si bien clausuró su comunidad de Jerez sigue conservando la tutela del templo.
Álvaro Barba asegura que la cofradía está dispuesta a marcharse a donde sea necesario, mostrando su preferencia por establecerse “en un barrio que tenga vida o en un colegio”, aunque sea “en el extrarradio”.
El caso es que en puertas del inicio de la Cuaresma todavía “está en el aire” la posibilidad de que la Hermandad del Resucitado abandone la Catedral antes de esta misma Semana Santa. “Es difícil trabajar así. Parecemos la oveja negra. Lo más importante de la Semana Santa –el misterio de la Resurrección- es lo menos importante para los cofrades”, lamentó.
Lo que sí tiene claro la hermandad es que la Virgen de la Luz se quedará en casa. Eso sí, el hermano mayor no oculta que está “deseando” convocar al cabildo de hermanos para decidir acerca de su participación en la procesión magna mariana del próximo 12 de octubre, estando convencido Álvaro Barba de que la respuesta será afirmativa.
