Podía ocurrir, y ocurrió. Las oficinas de Jereyssa apenas pudieron atender este lunes a los contribuyentes que acudieron a las ventanillas para abonar los recibos del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), cuyo plazo de pago expiraba precisamente este martes.
A este colapso han contribuido varios factores: la costumbre de la mayoría de ciudadanos de esperar al último día para pagar los tributos municipales; el hecho de que una buena parte de los trabajadores ha cobrado ya sus nóminas; y la decisión de determinadas entidades de ahorro de no gestionar el cobro de estos impuestos como consecuencia de la ruptura del convenio de recaudación que mantenían Ayuntamiento y Diputación.
A mediodía, la sede central de Jereyssa, en la calle Latorre, apenas podía atender a los contribuyentes, que debían esperar largas colas para abonar los impuestos municipales. De hecho, se repartió tal volumen de números que hubiera sido necesario que cada ventanilla atendiera a un centenar de personas para dar respuesta al total de la demanda.
Esta situación llevó al Gobierno local a reunirse en sesión extraordinaria con el objetivo de prorrogar el plazo otorgado para el abono de estos impuestos, que finalizaba hoy y que se prolonga hasta el próximo viernes 15 de junio. Desde el Consistorio se alabó la “rapidez y celeridad” con la que Jereyssa abordó esta solución, remitiendo un exhaustivo informe a la Junta de Gobierno Local justificando la necesidad de ampliar el plazo otorgado inicialmente para la recaudación de estos tributos.
El pago directo crece en un 900%
Según Jereyssa, la cifra de contribuyentes que ha acudido a pagar a sus ventanillas se ha incrementado esta campaña en un 900 por cien respecto a años anteriores, como consecuencia de la negativa a colaborar de algunas entidades de ahorro.
El ‘pago’ por la ruptura del convenio
Cajasol, Unicaja o La Caixa son algunas de las entidades que han optado por denegar la gestión del cobro de estos impuestos, respondiendo de este modo a la ruptura del convenio con Diputación que invalidaba tomas de razón de las que eran beneficiarias.