Los hechos ocurrieron cuando un grupo de amigos de esta nacionalidad, entre los que se encontraba la joven, acudieron a un chiringuito de La Alcaidesa y supuestamente consumieron bebidas alcohólicas. La menor, quien según las testificales del juicio también estaba bebida, se apartó del grupo por un momento y fue a descansar a una hamaca de la playa, quedándose semiinconsciente.
En base al escrito de acusación presentado por el fiscal, fue en este preciso momento cuando el acusado, de nacionalidad argentina, aprovechó la ocasión para cometer el abuso sexual. Dos de los compañeros de la menor observaron al hombre subido encima de la niña e intentaron, según los testimonios aportados, que apartarlo de su lado, pero fueron agredidos con un palo y no lograron evitar la consumación del acto sexual.
La defensa del acusado pide la libre absolución al considerar que la relación íntima fue consentida por la joven. Esta última, por contra, manifestó durante el juicio que no recordaba nada de lo sucedido. Las pruebas periciales presentadas ayer durante el juicio revelaron que existía semen del trabajador del chiringuito en el interior de la vagina de la joven, por lo que se considera probado que fue él quien mantuvo las citadas relaciones.
El juicio quedó visto para sentencia tras el testimonio de todas las partes citadas a comparecer en la vista. La resolución se conocerá en los próximos días.
Precedente
El caso juzgado el pasado miércoles en la Sección algecireña guarda muchas similitudes con el ocurrido en 2006 en la playa de Facinas, en Tarifa, que fue juzgado el 24 de abril de 2008 también en Algeciras. En aquella ocasión, una joven, también de nacionalidad alemana, caminaba por la playa cuando fue avistada por un individuo de nacionalidad española, quien en esos momentos se encontraba desnudo.
El agresor abordó a la víctima y comenzó a coaccionarla para que le realizase una felación, a lo que ella se negó. Inmediatamente después, trató de forzar una penetración. La joven empezó a forcejear con el ahora condenado llegando a arañarlo con las uñas, pero éste no cesó en su tentativa de violación, y llegó a abusar de su víctima introduciéndole los dedos.
Al igual que en el caso juzgado el miércoles, las pruebas periciales fueron decisivas para probar la implicación de este individuo en los hechos. La joven fue atendida el día de los hechos por otras dos personas en un chiringuito cercano a donde se produjo la agresión sexual. El fiscal pidió entonces 12 años de cárcel.
