Así, Roca acusa al gerente de Emroque, Luis Crespo, de la falta de información sobre el contrato, una vez analizado el mismo “ya que únicamente me informó sobre la necesidad de mantener dicho puesto de trabajo ante el gran volumen del mismo que la empresa tiene que realizar en los próximos meses, recomendando así la contratación de Herrera”.
Además, el edil aseguró desconocer “la situación laboral del contratado desde los días 6 al 13 de octubre, ni si el gerente informó o no a Herrera sobre la terminación de su contrato anterior, ante ello, he informado al secretario del Ayuntamiento y a su vez de Emroque que me informe sobre la legalidad de dicho contrato, considerando actualmente sin efecto lo firmado hasta tanto tenga respuesta al respecto”.
Según explicó Roca “mi preocupación por la renovación de dicho contrato se basa en el acuerdo de la Junta de Gobierno de no renovar contratos eventuales dada la mala situación económica del Ayuntamiento”.
Por su parte, el portavoz del PIVG, Jesús Mayoral, aseguró que “el consejero delegado no tiene porqué ser un experto en contratación ya que es responsabilidad del gerente informar de los contratos cuando caducan y si solicitan al consejero la firma de un contrato deben informarle antes sobre el mismo, e incluso no mandarle firmar un escrito seis días después con una fecha de cinco días antes”.
Por ello, Mayoral, advirtió que”si tenemos que ir a los juzgados iremos para defender la gestión de Roca, y si no es legal, se revocará, porque el PIVG no está por los enchufismos y se acabó el clientelismo político que han estado haciendo otros partidos”.
Por último, el concejal indicó que “hay que ser consecuente con los acuerdos porque no se han renovado 30 contratos eventuales en los últimos seis meses porque no se van a hacer indefinidos y porque no va a entrar nadie por la puerta de atrás y menos, de los partidos o políticos o las directivas. Además, desde el equipo de Gobierno se planteó la situación de crisis y la decisión debe ser unánime y esto no se puede obviar”.