Al parecer, los británicos recogieron sus enseres al detectar la presencia de la Guardia Civil. Hasta ese momento habían estado realizando prácticas de tiro contra la bandera española.
Según el relato de la Guardia Civil, el incidente se produjo sobre las 13.00 horas del pasado miércoles, a unas siete millas náuticas de Punta Europa (el punto más meridional del Peñón).
La nave británica, al ver acercarse a la patrullera española, lanzó advertencias por megafonía: “No pueden estar ustedes aquí, son aguas internacionales”.
Al respecto, el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, afirmó ayer que lo ocurrido en aguas de Gibraltar en torno a unas prácticas de tiro de la Marina británica ha quedado “perfectamente clarificado” ya que se trataba de “una boya de colores de la bandera nacional, pero no era la bandera”.
El ministro destacó que el embajador del Reino Unido en España, Giles Paxman, fue convocado por el director general de Política Exterior para Europa No Comunitaria y América del Norte, Luis Felipe Fernández de la Peña, y que el primero “ha presentado sus excusas y se ha comprometido a realizar una investigación” para depurar responsabilidades “en caso de que se haya cometido ese error”.
Distintivo marino
Moratinos incidió en que la información recibida es que “era una boya de colores de la bandera nacional pero no era la bandera nacional”, por lo que, pese a la “protesta” presentada por el Gobierno español, “queda perfectamente clarificada la situación”.
Con respecto a este asunto, el director general de Política Exterior para Europa no Comunitaria y América del Norte del MAEC convocó ayer al embajador del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del norte en Madrid para pedirle explicaciones y presentar una protesta por los incidentes ocurridos el pasado día 17 en aguas cercanas a Gibraltar.
El embajador británico ofreció la información de que dispone a día de hoy sobre dichos incidentes que, según asegura, tuvieron lugar a más de cinco millas náuticas de Gibraltar. Se trató “de uno de los ejercicios de tiro que realizan con periodicidad las patrulleras de la Real Armada británica”. En el curso del ejercicio “se utilizó como blanco una boya con un distintivo marino con los colores amarillo y rojo”. El embajador insistió en que, “a pesar del parecido, no representaba evidentemente una bandera de España”.
El diplomático británico presentó sus excusas por “el error de juicio y la falta de sensibilidad puestas de manifiesto” y prometió que “se abrirá una investigación a fondo, se exigirán las responsabilidades que correspondan y se tomarán las medidas oportunas para que un incidente de este tipo no vuelva a repetirse”.
Al respecto, fuentes oficiales de la Comandancia de la Guardia Civil de Algeciras aseguraron ayer a este diario que “se actuó correctamente en todo momento” ante el incidente “cumpliendo con nuestra obligación”, señalando que “se encontraba en aguas españolas” la Guardia Civil y que se “tramitó lo ocurrido a instancias superiores”.
Objetivo OTAN
Por su parte, el Ministerio de Defensa (MOD) en Gibraltar informó de que “un escuadrón del Peñón se encontraba realizando prácticas de tiro real en aguas internacionales el pasado día 17”.
El punto que era utilizado “como objetivo era el denominado número 1, que ha sido reconocido internacionalmente por la OTAN”. Este tipo de objetivo “tiene una marca roja con franjas amarillas” que es lo que el MOD entiende que “motivó la confusión respecto a la bandera española”.
No obstante, las mismas fuentes, “ante la situación creada, aseguraron que “no volverá a ser utilizado en un futuro este tipo de objetivo para evitar equívocos”.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), lamentó ayer el incidente a la vez que denunció “el acoso constante” que vienen sufriendo desde el pasado verano las embarcaciones de la Guardia Civil por parte de la Policía de Gibraltar y la Marina británica.
“Cualquier día puede ocurrir una desgracia”, advierte AUGC, que explicó cómo en ocasiones las patrulleras con base en el Peñón realizan maniobras “extremadamente peligrosas que ponen en peligro la vida de las tripulaciones”.
A ello se suma “que tanto los españoles como los británicos patrullan armados”, por lo que “algún día se puede llegar a una situación grave”, vista la tensión de los últimos meses.
Fuentes de la asociación lamentaron además el cambio de actitud de la Policía del Peñón, que hasta hace unos meses colaboraba de forma eficaz con el Servicio Marítimo de la Guardia Civil en la lucha contra el narcotráfico y el contrabando en aguas de Gibraltar.
También los miembros de la Benemérita alertaron sobre la “falta de apoyo institucional” y la ausencia de “directrices precisas con las que hacer frente a las provocaciones” de la Policía de Gibraltar y la Armada británica.
Críticas del PP
El diputado nacional del Partido Popular (PP), José Ignacio Landaluce, exigió ayer al Gobierno una “respuesta contundente” al incidente denunciado por la Guardia Civil “cuando descubrieron “a la Royal Navy realizando prácticas de tiro contra una bandera de nuestro país”.
“Se trata de un insulto a nuestra enseña nacional que viene a sumarse a los hechos denunciados una y otra vez por el PP en relación a las intimidaciones y expulsiones de embarcaciones de la Benemérita de las aguas españolas que rodean Gibraltar y con estas últimas noticias, ya han llegado a unos límites en los que, caso de demostrarse que estos hechos sean ciertos, el Ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos debe mostrar un pronunciamiento contundente en su repulsa a estos hechos ante el Reino Unido”.
El PP exigirá explicaciones urgentes en el Congreso interpelando a Moratinos” y, si se demuestra que han sido ciertos, “pediremos que sea el propio presidente del Gobierno para que repruebe y rectifique a Moratinos”.
Landaluce citó otro reciente incidente con una embarcación de la Guardia Civil “expulsada por las autoridades gibraltareñas” en el llamado Boquete de Poniente, en concreto, en una playa entre el espigón de La Línea y la zona del aeropuerto de Gibraltar.
Recordó que fue en esta misma zona litoral “donde la Royal Navy desembarcó una vez por error” poniendo como excusa “una neblina”. Landaluce puso de manifiesto la “escalada de violencia y confrontación” protagonizada, a su entender, por el Reino Unido para “tensionar la situación” y aprovechando “que la diplomacia española se acobarda con muchísima facilidad”.
