“Yo estoy de los nervios; he tenido que llevar a mi bebé de dos años a casa de mi madre porque la mía se ha llenado de cucarachas. No podemos seguir así más días”. Raquel está desesperada. Y no es la única en el bloque. En su caso, su puerta está justamente al lado de la del edificio de Vallesequillo II donde está el foco, en un cuarto piso, y propiedad de Emuvijesa, la Empresa Municipal de Viviendas de Jerez.
Fue ella misma, como presidenta de la comunidad de vecinos y como afectada, la que acudió a Emuvijesa el pasado 2 de septiembre para presentar una denuncia alertando de la situación. Les pedía que, como propietarios del inmueble, tomaran medidas y fumigaran. Entonces ya se veía venir lo que podría ocurrir por una problemática que empezó por el mes de agosto y que después de 14 días resulta insoportable.
“Es verdad que al día siguiente de poner la denuncia vinieron a visitar la casa afectada pero derivaron el asunto a Servicios Sociales, porque allí vive un vecino que no tiene medios, y se trae muebles y electrodomésticos de la calle. Sospechan que de ahí pueda venir todo. Él no ha puesto pegas, no es conflictivo, ha dicho que su casa está abierta para quien quiera acudir, pero no puede hacerse cago del coste de la fumigación”, explica a este periódico. El coste de esta actuación ronda los 200 euros aproximadamente.
Según detalla Raquel, la única actuación que se ha hecho desde que informó a Emuvijesa es fumigar el alcantarillado de la calle y tras mucho insistir. Mientras tanto, señala, estos insectos “se triplican por día y, de haber unas cuantas por el rellano, ahora están en las casas de los vecinos. Yo echo veneno a diario y estoy limpiando con productos especiales pero han puesto huevos y están por todas partes. Es asqueroso. Si antes entraban tres o cuatro en la casa, ahora se pasean por todo el bloque y se meten en las casas”, señala angustiada.
Viendo que cada día la cosa iba a más, ha llegado a consultar el caso con un experto. "Me ha confirmado que la especie germánica, que es la que tenemos en casa y el bloque, no se elimina actuando en el alcantarillado, sino con una fumigación a fondo en las casas", aclara.
Once días después de denunciar los hechos, el pasado lunes volvía a acudir a Emuvijesa casi a suplicar que intervinieran. Allí la derivaron a Bienestar Social y en última instancia a Medio Ambiente. “Me han dicho que las cosas de palacio, van despacio, ¿no se dan cuenta que esto es una urgencia?” .
Asegura además que en el piso posterior y superior viven mayores con problemas de movilidad y niños que también están sufriendo esta pesadilla.
"No estamos pidiendo que fumiguen cada casa, pero que se hagan cargo del coste donde está el foco como propietarios que son. No se puede jugar con la salud de las personas".
