Toda huelga indefinida conlleva sus efectos, y más si las partes en conflicto, en este caso el Ministerio de Justicia y los Letrados de la Administración (LAJ), no llegan ni tan siquiera a un principio de acuerdo o un tímido avance en la negociación en las tres únicas reuniones habidas.
Y eso es lo que está sucediendo en los juzgados y tribunales de Málaga donde el paro indefinido, que se prolonga ya desde el pasado 24 de enero, y que ha paralizado miles de juicios, pagos de pensiones, indemnizaciones y costas, ha provocado que los 'sindicatos tradicionales' hayan sacado un duro comunicado en el que censuran la actitud de los antiguos secretarios judiciales a los que acusan en algunos órganos judiciales de "vetar y frenar" su trabajo diario.
La huelga está convocada en toda España por las tres asociaciones profesionales CNLAJ, AinLAJ y UPSJ, en demanda de un incremento salarial por el número de funciones asumidas por los secretarios desde 2009.
La Junta de Personal de la Administración de Justicia de Málaga, en la que están los sindicatos UGT, USO, CSIF, STAJ y CC OO, que representan a unos 2.300 trabajadores de los juzgados por debajo de los LAJ, asegura que sin cuestionar "la legitimidad de la huelga indefinida, ni tampoco sus pretensiones", la misma está teniendo unos efectos en el trabajo diario que ejercen los gestores, tramitadores, el personal de auxilio judicial y los médicos forenses.
Estos sindicatos, que sí están negociando en Madrid con el Ministerio de Justicia otras cuestiones organizativas y laborales, recuerdan que la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) en los artículos 476, 477 y 478 fija las funciones de todos estos trabajadores de Justicia, y que "en modo alguno son delegadas, sino que se configuran como la competencia propia que corresponde 'per se', como obligación y derecho, de cada cuerpo. Son funciones que nadie está en posición de vetar, frenar, sustituir o suspender, ni siquiera de las jefaturas orgánicas", que la LOPJ atribuye a los secretarios.
Fuentes sindicales de Justicia en Málaga aseguran que no se están cumpliendo los servicios mínimos estrictamente, y que los LAJ asignados para ello "ralentizan su trabajo en los juzgados como medida de presión ante el Ministerio", lo que comporta una casi paralización en la tramitación de los pocos expedientes que siguen su curso.
"Se han llegado a suspender juicios que estaban previstos desde enero, y no se están tramitando los expedientes de pensiones de familia como ellos dicen, por lo que muchos ciudadanos acuden al juzgado a reclamar cuando nosotros, los funcionarios que no estamos en huelga, ninguna culpa tenemos de estos aplazamientos", indica una tramitadora.
ÓRDENES POR ESCRITO
La Junta de Personal sostiene en el comunicado que "el derecho a la huelga de unos no puede alzarse por encima del derecho al trabajo de otros", en referencia al millar de funcionarios que están destinados en el centenar de órganos judiciales de la capital malagueña (Primeras Instancias, Instrucciones, Penales, Contenciosos-administrativos, Menores, Familia, Violencia de Género, Registro Civil, Vigilancia Penitenciaria, TSJA, entre otros), y a los que se suman más de 60 juzgados unipersonales y mixtos que hay en Marbella, Estepona, Fuengirola, Torremolinos, Vélez- Málaga, Antequera, Coín, Torrox o Ronda. Los sindicatos aseguran que este personal tiene funciones propias en el juzgado, y que a diario no las pueden ejecutar por la huelga.
La tensión en algunos de los órganos de la capital y provincia ha llevado a la Junta de Personal a reclamar a sus 'jefes orgánicos' superiores que todas aquellas instrucciones emanadas de los LAJ hacia el personal del resto de cuerpos de Justicia, "que puedan resultar susceptibles de cuestionar las labores de los funcionarios, ya sea por exceso o por defecto, se hagan y se exijan por escrito" a los secretarios.
En este sentido, el Sindicato de Trabajadores de la Administración de Justicia (STAJ) ha pedido también al Ministerio que clarifique las funciones de los letrados durante la huelga, puesto que muchos están ordenando a los funcionarios a no tramitar ni siquiera en borrador" los expedientes para tratar de avanzar en el trabajo futuro. Una representante de la Junta de Personal definió el "atasco actual sin precedentes", lo que llevará en algunos casos retrasos en las citaciones y expedientes durante más de dos años.
STAJ recuerda que son funcionarios los que redactan, confeccionan diligencias, providencias, decretos y autos mediante las aplicaciones informáticas del Ministerio, pese a que según los comunicados de alguna de las asociaciones de letrados "parezca que son éstos los únicos que trabajan en Justicia".
En esta situación de bloqueo en la mesa de negociación con el Ministerio, una treintena de LAJ de Málaga se volvieron a concentrar este miércoles al mediodía a las puertas de la Ciudad de la Justicia en Teatinos. Posteriormente celebraron una asamblea en la que se respaldó al Comité de Huelga nacional.
Un portavoz de la asociación de secretarios de la UPSJ en Málaga indicó que "los letrados respetamos el trabajo y la preparación de los otros cuerpos de Justicia. Y si un letrado está en huelga no va a dar instrucciones de un asunto que no haya impulsado, pero si creen que algún compañero conculca su derecho y se excede en sus funciones que vayan y lo denuncien con nombres y apellidos. Si no se les da instrucciones de cómo trabajar es porque el letrado está en su derecho al paro".
Desde la UPSJ se recordó que las instrucciones verbales de los secretarios "son válidas, pero si alguien las quiere por escrito deberá solicitarlas y se dará respuesta".
