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Lunes 25/11/2024
 

Málaga

Condenan a un hombre por pegar a otro tras recriminarle una relación con su novia

Se le impone el pago de una multa

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La Audiencia de Málaga ha condenado al pago de una multa a un hombre por pegar puñetazos y patadas a otro por diferentes partes del cuerpo, tras recriminarle haber tenido una relación sexual con su novia. Así, se le absuelve de un delito de detención ilegal, al igual que a un segundo acusado en esta causa; y también de otro de obstrucción a la justicia.

   Los hechos sucedieron en diciembre de 2008 en el portal del bloque en el que vivía uno de los acusados en la localidad malagueña de Fuengirola. Según se declara probado en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, uno de ellos mantenía una "manifiesta" enemistad con la víctima "motivada por una supuesta relación sexual que éste habría mantenido con su pareja".

   Así, tras preguntarle "insistentemente" a la víctima si había mantenido esa relación, el procesado "comenzó a golpearle, propinándole puñetazos y patadas por diferentes partes del cuerpo", por lo que el otro acusado los separó, "sin que se haya acreditado la participación de éste en la agresión". El perjudicado sufrió varias lesiones y secuelas.

   Para la Sala, según señala en su resolución, no ha quedado probado que días más tarde de estos hechos, el acusado, conocedor que de que había sido denunciado por la víctima, al encontrárselo por la calle se le aproximara y con la intención de que retirara la denuncia interpuesta le dijera: "cuando salga te voy a buscar y voy a reventarte".

   El Tribunal señala que "no hay duda" de que se trata de una agresión que "ha causado a la víctima lesiones que, por su resultado, no han requerido tratamiento médico", y que, por tanto, deben encuadrarse en una falta. Así, se le impone el pago de 360 euros y abonar al perjudicado la cantidad de 1.800 euros por las lesiones y las secuelas sufridas.

   No se considera probado que hubiera una detención ilegal ni una obstrucción a la justicia, como acusaba el fiscal, apuntando que la víctima se retractó en el juicio. En este sentido, se señala que las declaraciones del testigo-víctima son para la Sala "artificiosas, quedando considerablemente mermada su credibilidad, sin que pueda, por otro lado, darse mayor verosimilitud a las manifestaciones previas" durante la instrucción.

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