"Érase una vez una historia, una llena de superación, de personas que día a día luchan por su pasión, donde las princesas y príncipes no van montados a caballo, y en el que los dragones tienen muchas veces aspecto humano”. Así define el fotógrafo malagueño Daniel Guadamuro la exposición que ayer estrenó en Microteatro Málaga, ‘Inclusiónarte’. Instantáneas que reflejan, casi sin llamar, colándose como un observador invisible, la naturalidad de los ensayos del grupo de teatro ‘Los Sinsentidos’, con sordos y ciegos o ‘Arribadown’, de personas con Síndrome de Down. O la cotidianidad de los que han llegado al olimpo del esgrima paralímpico, que se codea con el universo más íntimo de quienes echaron mano de la pintura para demostrar que ellos también pueden pese a tener una de las llamadas enfermedades raras.
“Son historias de personas que se superan día a día, que afrontan la vida siempre con una sonrisa en la boca”, cuenta el autor, que conectó con esta realidad de capacidades simplemente diferentes tras realizar un curso de interpretación de lengua de signos. Por mera afición. O quién sabe si destino. Que le llevó hasta los ‘Sinsentidos’.
Acostumbrado a retratar a actores y actrices encima del escenario, ahora se ha propuesta hacer de su habitual vehículo de expresión, el mejor de los canales para demostrar que la inclusión “es una realidad, todavía muy desconocida por muchos pero debemos seguir luchando”.
Un estreno que coincidió con otro también mágico del que podremos disfrutar los domingos del mes de mayo, a partir de las siete y media de la tarde. El de ‘Bella’, una pieza de teatro danza basada en el tradicional cuento de ‘La Bella y la Bestia’ y protagonizada por Jamp Palô y Lorena Mérida, una joven actriz con Síndrome de Dow.
“Para mí ha sido toda una experiencia vital, que me ha enseñado a valorar de verdad las cosas”, admite. Pedacitos de una realidad que lanzan un mensaje al mundo. Se han dado muchos pasos pero toca seguir derribando barreras.