Óscar Torres y Rosa de la Flor se miden este domingo en unas primarias que, en clave interna, deben servir para cerrar definitivamente la brecha abierta en el seno del PSOE con el portazo de la entonces portavoz del grupo municipal en el Ayuntamiento, Mara Rodríguez, a mediados del pasado mes de enero tras dos años y medio de desencuentros con la dirección local.
Con Rodríguez, renunciaron a su acta Francisco Javier Ramírez y la propia Rosa de la Flor, quien tuvo un especial recuerdo para ambos la noche del 30 de noviembre, cuando presentó su candidatura para liderar la lista socialista en los próximos comicios municipales. “Los llevo en el corazón”, aseguró.
La abogada, vinculada a UGT desde los ochenta y militante del PSOE desde hace 15 años, cargó ante una abarrotada Casa del Pueblo contra el secretario local de la agrupación, José Ramón Ortega, por avalar a su rival. Efectivamente, Óscar Torres contó con el apoyo en su puesta de largo como aspirante a cabeza de cartel en las elecciones municipales del también diputado nacional. Y, aunque ha evitado el cuerpo a cuerpo, hasta el punto de, según la candidata, negarse a debatir ante los afiliados durante este proceso, criticó a Rosa de la Flor y su equipo por considerarse “los elegidos”.
Los contendientes tratan de marcar distancias, asimismo, en el discurso. Ambos sacan pecho por su lealtad a las siglas: Óscar Torres ha sido definido por sus afines como “buen socialista y hombre de confianza”; la ex concejala, se plantó en la sede local con el puño en alto. Y los dos tienen claro que es preciso reconectar con los electores porque la pérdida de apoyos en las urnas es creciente: lejos de la aplastante victoria de 1983, con casi el 60% de los votos válidos, en 2015 y 2017, el PSOE registró sus peores resultados en unas locales, con apenas el 17,32% y 17,23% de las papeletas, respectivamente.
De la Flor considera que las primarias deberían servir para reflexionar sobre esta caída. “No sé si es por nuestra posición elitista”, indica, porque los valores del socialismo “se viven, y muchos compañeros no lo han hecho así”. Por lo que plantea la elaboración de un diagnóstico que sirva para desarrollar el I Plan Estratégico de la Ciudad de Cádiz, con la participación de las demás fuerzas, la Universidad de Cádiz y las organizaciones sindicales, empresariales y civiles. Torres también es partidario de pisar la calle, y en ello se emplea a fondo, pero toma como referente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y aboga por una oposición constructiva, llegando a entendimientos con el equipo de Gobierno.
Dicho esto, los 540 militantes se pronunciarán hoy sabedores de que de su decisión restará o sumará opciones en las elecciones en mayo más abiertas de los últimos años.
