Otegi, que llegó ayer a la cárcel riojana, se encontraba en Martutene desde que a mediados del pasado mes de abril la Audiencia Nacional le concediera un permiso para hacer dos visitas a su padre enfermo.
Cuando el tribunal le concedió ese permiso, Otegi –preso desde octubre de 2009 acusado de intentar reconstruir la formación ilegalizada– estaba en la cárcel madrileña de Navalcarnero, desde la que fue trasladado a Martutene para facilitar las visitas a su progenitor, lo que hizo custodiado por las Fuerzas de Seguridad.
Fuentes jurídicas consultadas en la Audiencia Nacional explicaron a Efe que una vez disfrutado ese permiso –que se refería sólo a la posibilidad de abandonar la prisión en determinadas fechas para ver a su padre– la decisión de si Otegi era llevado de nuevo al centro penitenciario de Madrid del que salió, trasladado a otro o permanecía en Martutene correspondía a Instituciones Penitenciarias.
Ahora, este departamento decidió que el ex portavoz de Batasuna ingrese en Logroño.
Otegi compartirá la prisión riojana con tres presos etarras de la “línea dura”, informaron a Efe fuentes penitenciarias.
Se trata de los reclusos etarras José Ramón Martínez de la Fuente, Txomin Sola Torres y Garikoitz Pascual Mureta.
Martínez de la Fuente formó parte del comando Nafarroa de ETA en los años 80 junto a Mercedes Galdós Arsuaga, José María Zaldua Corta y Pedro María Gorospe Lertxundi.
Detenido por la Policía francesa en enero de 1985 está cumpliendo una condena de 30 años de prisión por varios asesinatos.
Su compañero de cárcel, Txomin Sola Torres, detenido por la Guardia Civil en 1993, también colaboró con el comando Nafarroa a principios de la década de los 90.
