La Guardia Civil ha culminado la operación Hortelano con la intervención de 960 plantas de marihuana y la detención en Cájar (Granada) de una pareja, de 26 años ella y 34 él, ambos con antecedentes policiales, por delitos de defraudación de fluido eléctrico y contra la salud.
En esta operación se ha contado con la colaboración de los técnicos de la empresa Endesa, que trabaja de forma permanente con la Guardia Civil en la detección de anomalías en la red eléctrica para garantizar el suministro y la seguridad de los usuarios.
Después de varios días vigilando un chalet de grandes dimensiones de los detenidos, los agentes de la Guardia Civil de Maracena confirmaron las sospechas que tenían sobre la posible existencia de una gran plantación de marihuana en su interior y solicitaron autorización judicial para realizar un registro domiciliario.
Los agentes descubrieron 960 plantas de cannabis repartidas en diversas habitaciones del bajo de la vivienda y totalmente adaptadas para el cultivo de marihuana, además de gran cantidad de focos, varios aparatos de aire acondicionado y extractores de aire con filtro de carbono.
Al igual que en otras ocasiones la vivienda contaba para el abastecimiento de electricidad con una acometida ilegal a la red eléctrica. Estas instalaciones fraudulentas no homologadas pueden provocar graves incendios que pueden afectar a terceros.
Durante 2016, se produjeron 36.701 interrupciones de suministro en todo el año. La gran mayoría estaban provocadas por el funcionamiento de los elementos de protección de las instalaciones, que para evitar daños mayores, desconectan las redes cuando detectan sobrecargas o anomalías.
En la mayoría de los casos, estas sobrecargas tienen su origen en clientes conectados ilegalmente a las redes, siendo especialmente significativos los casos de plantación de cannabis en el interior de viviendas.
