El ex matador y empresario de la Plaza de Toros de Ronda, Francisco Rivera Ordóñez, ha desvelado en una entrevista al diario Abc los temores que ha sufrido las últimas semanas antes de la corrida Goyesca de Ronda tras haber sido corneado hace un mes Morante de la Puebla, que anunció la histórica tarde de toros que felizmente pudo celebrarse el sábado.
Paquirri, que define la goyesca de este año como "bonita y rematada, fruto del trabajo hecho con mucho tiempo", para asegurar que "se trataba de una apuesta muy grande", no ha negado que "sustituir a un torero como Morante era muy complicado", revelando que "la opción que al final se estaba barajando era hacerla por la noche, y conté con el apoyo absoluto para ello de Manzanares y estoy convencido de que también habría contado con el apoyo de El Juli", a pesar de que uno toreaba en Valladolid y otro en Bayona. Pero es que incluso llegó a pensar en un cartel con históricos del toreo: "Hubiese quedado bonito: Manzanares padre, Paco Ojeda, Pepe Luiz Vázquez, Joselito, Rivera Ordóñez y Cayetano. Era un locura, pero hubiese quedado a un nivel muy alto".
Rivera Ordóñez asegura que todo lo que hace pensando en la goyesca lo gestiona "anteponiendo un mi abuelo, ¿qué hubiera hecho?", en relación al maestro Antonio Ordóñez: "Él me inculcó desde chiquitito el camino de la Goyesca, y lo que debe ser y cómo tiene que sentirse".
En la entrevista, Paquirri niega que haya descartado actuar más veces en la corrida rondeña: "Si dijese que no voy a torerar más la Goyesca estaría mintiendo como un bellaco", se despide.