De un lado y en representación del Ayuntamiento isleño la alcaldesa, Patricia Cavada, el concejal de Presidencia, Conrado Rodríguez, y el delegado de Deportes, Antonio Rojas. Del otro, representantes de las peñas del San Fernando CD como son Templo Azulino, Palante, Orgullo Isleño y Peña Azulina El Carmen 1689 y algunos aficionados -en total unos 20-. A ellos hay que sumar dos representantes de la entidad azulina como son su presidente Louis Kinziger y el directivo Pedro Ramírez. Y, por último, el principal protagonista que ha sido el arquitecto ganador de la redacción del proyecto del nuevo Estadio Iberoamericano, Manuel Díaz Periñán.
Los propios socios y aficionados no quisieron que hubiese luz y taquígrafos, es decir, medios de comunicación para que no se hiciese un uso partidista del acto, pero este medio ha podido conocer en exclusiva muchos de los puntos abordados durante la reunión, un encuentro en el que se las ha dado a conocer con todo lujo de detalles, con video incluido que ilustra esta noticia, hacia dónde se encaminará el proyecto del nuevo estadio, los plazos, inversión prevista e, incluso, que pasará si finalmente el PSOE no sigue en el gobierno a partir del 28 de mayo.
“Satisfacción y esperanza” con el proyecto, pero a la vez cierta "desconfianza" en los plazos de ejecución. Ese es el sentir que se respiraba entre los peñistas y aficionados azulinos al acabar el encuentro desarrollado en el Ayuntamiento y que se ha prolongado por espacio de 45 minutos.
Además, los asistentes incluso han aportado diferentes puntos de vista sobre otras demandas que consideran necesarias y que, en este sentido, se ha abierto la posibilidad de que sean incluidas en la redacción del proyecto, cuyo plazo es de cuatro meses. Así, se ha pedido que los banquillos se incrusten debajo de la tribuna y no a pie de campo, como era la idea inicial que aparece recogido en el boceto del proyecto. También, y en el caso de la Tribuna, alguna medida para combatir el frío y el viento en invierno, así como el calor en verano. Al respecto, se está sopesando la opción de poner paneles de metraquilato en la zona de atrás.
También se cuestionó sobre dónde irá el marcador o los marcadores y es que, llegados a este punto, se abren dos opciones. Por un lado, dos de menores dimensiones que se colocarían en mitad de las dos alturas de los fondos, o uno de mayores dimensiones cuya localización está por decidir.
Pero, ¿qué ha cambiado para creer que esta promesa será ahora una realidad? Pues bien, incluso el propio presidente del San Fernando, Louis Kinziger, dio el paso al frente al mostrar confianza ciega y ser el principal valedor de que se llevará cabo, después de los fiascos de épocas pasadas, cuando las promesas electorales de un nuevo estadio se quedaban cogiendo polvo en un cajón.
Es más, incluso en estos últimos cuatro años la opción de que el campo fuese una realidad estuvo sobre la mesa, ya que el Gobierno local se lo ofreció al grupo inversor, pero la llegada de la pandemia truncó esa opción y, posteriormente, los dueños del San Fernando cambiaron de opinión y apostaron de manera decidida por la ciudad deportiva y no por el estadio.
En cuanto al plazo de ejecución, la propia alcaldesa ha dejado claro que tiene en mente en que se haga en los próximos cuatro años, e incluso llevar para delante de manera paralela ambos proyectos, es decir, el del estadio de fútbol junto con el de atletismo.
Además, las obras del estadio serán faseadas, lo que permitirá al equipo no tener que mudarse y seguir jugando en Bahía Sur mientras que se ejecutan.
A partir de aquí, toca saber qué pasará si al final tras el 28 de mayo hay relevo en el Gobierno local. Desde el PSOE tienen claro que el proyecto estará redactado y la patata caliente pasaría al nuevo equipo de gobierno.
