Miguel Redondo Rosillo, Miguelón, sigue con su particular cruzada para denunciar todas aquellas barreras arquitectónicas que suponen un freno en el día a día de las personas con minusvalías, a lo que suma aquellas zonas de la ciudad en las que combatir el tráfico rodado supone una auténtica odisea para los que precisan de una silla de ruedas para poder desplazarse como es su caso.
En esta ocasión quiere denunciar a través de este medio y también lo ha hecho a través de su muro en Facebook la falta de respeto constante de los conductores, es la tercera vez que le sucede en los últimos cinco meses, en tres pasos de cebras que se encuentran muy cercanos uno de otros. En concreto, son el que está situado en León Herrero a la altura del Observatorio, el que hay un poco más hacia arriba justo enfrente de la oficina del DNI en el Parque y el que se encuentra en General Pujales en el colegio Manuel Casal Carrillo.
Miguelón narra que “el conductor de mi izquierda me cedía el paso, pero el de mi derecha pasaba de largo a toda velocidad y las personas que lo veían en directo se echaban las manos a la cabeza. A dónde vamos a ir a parar si no se respeta ni a una silla de ruedas”.