Al guardia civil Juan Antonio Delgado, nacido en San Fernando hace 44 años, le llovieron las críticas, pero también los parabienes, cuando anunció que se incorporaba a Podemos. Es consciente del reto que supone pasar de la institución más valorada a la peor, los políticos. Pero lo asume, como asegura en una entrevista con Efe.
Confiesa que hasta se le desenganchó el cable con el que cargaba el teléfono móvil cuando el líder de Podemos, Pablo Iglesias, le llamó para pedirle que formara parte de sus listas electorales. "No me lo creía. Me parecía irreal e, incluso, me asusté. Nunca había tenido como objetivo la política", recuerda.
Delgado, que figura en el número 2 de la lista de Podemos por Cádiz para las elecciones del próximo día 20, entiende que resultara "chocante" que un guardia civil se incorporara a "un partido de la gente", incluso a cualquier fuerza política.
En democracia no ha habido un caso similar en España, señala Delgado antes de asegurar que si un agente del instituto armado se hubiera incorporado a un partido de la derecha, "hubiera pasado más desapercibido".
Ninguno de sus compañeros de Podemos le han manifestado rechazo alguno por su incorporación, pero no le resultaría extraño que alguien lo haya criticado. "Sería lógico", comenta Delgado, quien, según resalta, ha sido bien acogido en los "círculos" de su formación en Cádiz.
Durante años fue portavoz de la asociación mayoritaria de la Guardia Civil, la AUGC, y se dedicó casi en exclusiva a defender los derechos laborales de los agentes. Ahora se afana en conocer los problemas de todos los españoles para ofrecerles soluciones desde la política, consciente del "desapego" de los ciudadanos a ésta.
Reconoce que no es fácil olvidarse del tricornio y, de hecho, muchos guardias le han pedido que no se olvide de ellos. Y no recibió -dice orgulloso- ninguna crítica de los agentes cuando asistió a la "marea de tricornios" que AUGC protagonizó el 14 de noviembre.
Al número dos de Podemos por Cádiz no le preocupan las encuestas y sí augura que saldrá elegido el 20D, porque ha constatado un "movimiento de cambio muy importante" en su provincia, donde ya saben qué es ganar unas elecciones con el ejemplo del alcalde de la capital gaditana, José María González, Kichi.
Opina Delgado que este regidor "lo está haciendo bien" a pesar de haberse encontrado la caja del ayuntamiento "tiesa" y "prácticamente en quiebra".
¿Qué puede aportar un guardia civil a Podemos? El número 2 por Cádiz cree que su experiencia en las fuerzas de seguridad para reflexionar sobre el modelo policial que necesita España y que acabe con el "laberinto" actual, con cinco cuerpos diferentes trabajando en algunos territorios.
Una reflexión que debe tener en cuenta los 10.000 guardias civiles y policías que se han perdido en los últimos años y la descoordinación entre cuerpos que, a veces, se traduce en un trabajo "de espaldas al otro que roza la competencia desleal", añade.
Y deja clara la necesidad, que comparte su partido, de que los guardias civiles, a pesar de su carácter militar, puedan tener sindicatos, como ocurre en otros países, y de que no se les aplique el Código Penal Militar.
Sobre esa mesa de trabajo de Podemos para analizar el modelo policial se pondrá también la necesidad o no de unificar la Policía y la Guardia Civil en un solo cuerpo.
Juan Antonio Delgado se refiere también al pacto antiyihadista que Podemos no ha suscrito, aunque acudió de observador en la última reunión de su comisión de seguimiento.
El candidato se muestra en contra de una intervención militar y considera que no se debe ceder en democracia ni recortar derechos y libertades en la lucha contra los yihadistas, porque si no, "ganan los terroristas".
"A nadie se le hubiera ocurrido ir al País Vasco con tanques", añade Delgado para recordar que la unidad y la democracia acabaron con ETA, a la que se atacó policial y judicialmente e, incluso, se la asfixió económicamente.
Delgado recuerda que los terroristas yihadistas que han atentado en Europa vivían en Francia y en Bélgica. "El problema lo tenemos aquí y debemos avanzar hacia una coordinación real y efectiva de los centros de inteligencia de los países de la UE", concluye