El Salón Don Benigno de Bodegas Barbadillo acogió la Asamblea General Ordinaria de Socios del Atlético Sanluqueño, acto que tuvo una duración de dos horas y que reunió a más de 100 personas. La mesa estuvo compuesta por varios miembros de la junta directiva con su presidente, Manolo Fernández, al frente. Se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento de Francisco Pacheco, persona muy ligada al club.
Se analizó la pasada temporada, tanto deportiva como económicamente, así como los vaticinios de la venidera.
Así, la entidad verdiblanca propuso el presupuesto de la próxima temporada, la 2017-2018, que fue aprobado por los socios verdiblancos. Se dio a conocer que los ingresos sean 433.100 euros y los gastos 392.217, que producirían un superavit de 40.883.
Un presupuesto inferior al de la pasada temporada motivado por el descenso desde la Segunda División B a la Tercera División. En este sentido, Manolo Fernández hizo hincapié en que “sería bueno tener un dinero sobrante en caso de ascender de nuevo de categoría”.
También fueron aprobadas las cuentas de la temporada que finalizó, la 2016-2017. Los gastos alcanzaron la cantidad de 573.577 euros, que incluyeron deudas anteriores, y los ingresos fueron 576.988, con lo que el superavit quedó fijado en 3.411.
La persona más representativa de este club de la Ciudad de la Manzanilla resaltó que “en comparación a otros años nos encontramos en una mucha mejor situación económica y estructura deportiva. Estamos ingresando más que nunca gracias al modelo de gestión que llevamos a cabo. Y además cada vez estamos más relacionados con distintos organizamos y con otros clubes”.
Valoró que “es para estar orgullosos como hemos acabado la temporada en el apartado económico. Durante la misma hemos equilibrado las cuentas y hemos luchado por lo que es nuestro. Le ganamos, por ejemplo, una demanda al Celta por un dinero que el Celta se negó a darnos y lo conseguimos. Y esa cantidad fue de 13.500 euros”.
En cuanto a la construcción de la nueva cantina, que daría más espacio a la sede porque en este lugar del Estadio El Palmar se encuentra el bar, dio a conocer que “hubo dos empresas que estaban dispuestas a financiarlas desde el principio pero socios del club consiguieron atrasar las obras. La cantina no puede dejar unos beneficios de 15.000 euros al año”.