Ante la propuesta de Fedejerez en sede del Consejo Regulador que pretende que la Manzanilla deje de existir como denominación de origen independiente tras cincuenta y seis años de existencia, Bodegas de Sanlúcar comunica a cuantas personas físicas y jurídicas pudiese afectar esta gravísima propuesta en caso de tener éxito, que la asociación defenderá a la Manzanilla de Sanlúcar hasta última instancia.
En una situación tan difícil como la que atraviesa el sector manifesta “nuestro asombro ante lo que consideramos una propuesta contra Sanlúcar y sus vinos, especialmente grave en estos momentos donde la pandemia del COVID-19 afecta a toda la economía nacional y con especial dureza al sector vitivinícola”.
La Manzanilla representa según informe reciente del Consejo Regulador dentro de nuestro país más del 56% de las ventas totales de vinos comercializados amparados, teniendo en el Fino uno de sus principales competidores aunque con cifras muy inferiores en cuota de mercado.
Las diferencias entre Manzanillas y Finos, certificadas por el Consejo Regulador desde la constitución del mismo el siglo pasado en 1933, se ponen además ahora en cuestión por operadores obedeciendo exclusivamente “a intereses comerciales”, por lo que llegados a este extremo, anuncia que “ya hemos establecido el diálogo con la Junta de Andalucía y anunciado a través de la Comisión de la Manzanilla nuestra firme decisión de solicitar la separación efectiva de la Manzanilla de Sanlúcar y los Vinos de Jerez”.
Considera que un solo Consejo Regulador con Plenos independientes para cada Denominación de Origen pondrá fin a una tensión innecesaria, otorgando seguridad jurídica y económica que aporte tranquilidad al sector, donde tanto los órganos de decisión de la D.O. Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda como de la D.O. Jerez-XérèsSherry estén conformados únicamente por sus operadores reales, sin injerencias de ningún tipo que puedan vulnerar las leyes vigentes de Competencia y Libre Mercado.
Aboga como “siempre hemos hecho por el diálogo permanente junto a viñistas, bodegas y cooperativas, con la ayuda y protección de las diferentes Administraciones Públicas”.
