El secretario general de MCA-UGT Sevilla, Manuel Ponce, ha denunciado este martes la "precarización laboral" que sufre la base de Morón de la Frontera, objeto del convenio de cooperación firmado entre Estados Unidos y España que permitirá a los norteamericanos tener una base permanente de operaciones, con hasta 3.000 militares, para su lucha contra el yihadismo en el norte de África.
En rueda de prensa, Ponce ha mantenido que la realidad laboral de la base de Morón "se aleja mucho" de lo firmado por el Gobierno con Estados Unidos ya que dicho acuerdo "se olvida de los trabajadores de la base, algo que es intolerable". En esa línea, ha recordado que 240 trabajadores se han quedado sin empleo por la aplicación de dos expedientes de regulación de empleo (ERE) desde 2013 y ha subrayado que "ningún acuerdo que no asegure el empleo en la base nos sirve", informa UGT en un comunicado.
Ponce ha puesto el acento sobre la "precarización" del empleo en la base, algo de lo que el sindicato ha venido advirtiendo y, partiendo de que "el empleo es la base del acuerdo firmado por España para mantener las bases en suelo español y éste no está garantizado", se ha preguntado "para qué nos sirve tener bases en territorio andaluz".
Para el responsable sindical, "las necesidades de los Estados Unidos se han visto perfectamente reflejadas en el acuerdo, sin embargo ni una sola de las necesidades de España ha sido reflejada en el mismo", razón por la cual UGT se opone "tajantemente" al convenio.
"SOLEDAD" PARA LOS TRABAJADORES
Por su parte el presidente del comité de la Base de Morón (UGT), José Armando Rodríguez, ha insistido en la ausencia de debate sobre las bases en Andalucía y ha lamentado la "soledad a la que se verán abocados los trabajadores si finalmente se ratifica el acuerdo el próximo jueves en el Congreso".
Rodríguez "ha destacado la preocupación de UGT porque sus compañeros despedidos en 2013 aún no han percibido sus indemnizaciones y acaban sus prestaciones por desempleo este mes" y ha calificado de "cinismo" el hecho de continuar promoviendo acuerdos satisfactorios por ambas partes en relación tanto a los trabajadores temporales como permanentes, "después de firmar tres ERE en dos años".
