Hasta hace dos días, Paula Ortiz, la directora de "La novia", pensaba que su protagonista, Carlos Álvarez-Nóvoa, asistiría en San Sebastián al estreno del que ya es su último trabajo pero hoy, reconocía a Efe entre sollozos, ha tenido que rendirse a la evidencia de que su maestro se ha ido.
"Es muy difícil hablar de Carlos. En todas las historias que yo he hecho, cortos y largos -su anterior película fue "De tu ventana a la mía"-, sale él. Ha sido un maestro, una de mis anclas en la vida. Amigo de mi padre, era una persona que me ha marcado y me ha enseñado lo esencial de la vida", ha explicado sobre el actor, fallecido hoy a los 75 años en Sevilla.
Cuando le propuso que protagonizara "La novia", que esta noche se proyectará para la prensa que cubre el Festival de San Sebastián y el viernes se presentará en rueda de prensa, Álvarez-Nóvoa estuvo encantado con la elección de que hubiera pensado en una historia de García Lorca.
"Muchos me decían que si estaba loca, pero él me animó desde el minuto cero. Fue un apoyo incondicional. Es el padre de la novia, un hombre de campo que casa a su hija en busca de unas tierras a cambio", resume la directora.
Está conmocionada porque a pesar de que el actor llevaba enfermo desde este verano, cuando sintió un dolor muy fuerte durante la representación de una obra de teatro, "ha sido todo muy rápido. Siempre pensé que saldría de esta", dice.
Tanto es así, revela, que no quiso contarle nada del resultado de la película para que la viera en San Sebastián.
"Carlos tenía una profundidad absolutamente fuera de lo común e incorporaba los personajes de mayor calado moral, filosófico y poético de forma natural. Este es un texto de luz, como todos los clásicos y él está brillante", asegura.
El actor -ganador del Goya al mejor actor revelación por la cinta "Solas" (1999)- "se fijaba en lo esencial" y estaba "fuertemente comprometido con todo y eso se transmite en la pantalla", apostilla.
"Nunca me imaginé que esta noche y la de la presentación fueran a ser así. Ha sido un amigo toda la vida desde que empecé y la persona que me dio la mano cuando no sabía ni siquiera que yo sería capaz de hacer algo", ha añadido la directora, muy triste aunque consciente de que ha sido "una privilegiada" por haber compartido con él "tantas buenas cosas".
