Emmett continua su frenético caminar hacia la definitiva consolidación, de la mano de su segundo trabajo discográfico, Era Inevitable, un título que se convierte en premonitorio, ya que es inevitable el crecimiento de la formación, e imparable su fortalecimiento en el panorama musical sevillano, andaluz, nacional e internacional.
Emmett es una banda sevillana que mezcla a la perfección sus raíces musicales anglosajonas con la contemporaneidad de sonidos más electrónicos. Todo está basado en unas trabajadas y muy cuidadas letras, por supuesto en castellano, complementadas con estribillos enérgicos, cargados de detalles y con magistrales arreglos.
Estos exquisitos condimentos hacen que todo el que se detenga a degustar sus canciones, descubra en cada escucha, ricos paisajes sonoros, especialmente en texturas y melodías pegadizas, que se quedan en la cabeza de los oyentes, sin querer irse.
Toda esta historia, llamada Emmett, tiene un punto de partida perfectamente nítido. Es a finales de 2014 cuando Ángel S. Guil lanzó en solitario el LP debut de nombre homónimo “emmett”, basado en un estilo compositivo realmente honesto, muy directo y con una gran cantidad de de alusiones temporales, además de grandes viajes imposibles.
Su primer trabajo de estudio le llevó a realizar numerosos conciertos, en acústico, hasta que llego el año 2016 y se tomo la determinación de crear la banda.
Fue en ese momento cuando se integran a la formación, para completarla, músicos de la talla de Luis A. Mendoza, Fran Rosado, Alexis Schördinger y Jorge Mesa.
Su LP debut no ha pasado desapercibido en España, ya que rápidamente dio el salto de Sevilla al resto del territorio nacional, pero tampoco en Latinoamérica, en países como México, de gran tradición musical, y también en Estados Unidos, cosechando bastantes críticas positivas en todas esas latitudes.
Sin duda, estamos ante una de las bandas emergentes con mayor potencial para convertirse en referente nacional, con una puesta escénica vibrante y de una calidad sonora rotunda.
Emmett vuelve dispuesto a hacernos disfrutar con sus canciones del presente, del pasado y del futuro; un reloj de arena capaz de detener el tiempo en cada canción.
Su segundo disco supone la consagración como una banda muy a tener en cuenta en este 2017. Un disco que será un punto y aparte a nivel musical en su trayectoria.
Es, definitivamente, un cambio de rumbo hacia una música más optimista, más enérgica, viva, y con un sonido más claro, maduro y contundente.
Este trabajo discográfico ha sido producido por la propia banda y Jordi Gil, un gurú del sonido en el que confían grupos de la envergadura de los también sevillanos Maga, Sr. Chinarro, o el mismísimo Iggy Pop. Ha sido grabado, mezclado y masterizado en los estudios Sputnik de Sevilla.
En Era Inevitable podemos disfrutar de canciones muy trabajadas en estudio y con cuerpo. Canciones como “Segundos”, “Busco”, “Dónde están los monstruos”, “Dos mil zumbidos”, “Ser invisible”, “Tú”, “Un flashback casi eterno”, “Miedo”, “Cosmonautas del olvido” y “Mis grandes defectos”.
