La familia española de Maloma, la joven natural del Sáhara Occidental y nacionalizada española al ser adoptada por este matrimonio de Mairena del Aljarafe (Sevilla), sospecha que la familia biológica de la joven medite pedir un "rescate" por ella. En ese sentido, reclama al Gobierno central que si es necesario, "pague como en los demás casos de españoles secuestrados" en el extranjero, para que sea liberada de su supuesta retención en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf (Argelia).
A través de un manifiesto recogido por Europa Press, el padre adoptivo de Maloma, José Morales, insiste en que la joven lleva ya más de "18 meses secuestrada por su familia biológica en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf.
José Morales insiste en que la joven es "ciudadana española de pleno derecho" y desde que en diciembre de 2015 acudiese a los campamentos saharauis a visitar a su familia biológica, "está privada de libertad" por sus propios familiares, "con el consentimiento del Frente Polisario, incapaz de imponer su autoridad y de hacer cumplir sus propias leyes en el territorio que controla". "Está vigilada, sometida y obligada por cuestiones machistas, víctima indudable de violencia de género que no está teniendo ni la atención del Gobierno, ni de las demás fuerzas políticas españolas".
Y frente a los vídeos protagonizados por la joven negando que esté secuestrada por su familia biológica y su boda hace pocos meses en los campamentos, el padre adoptivo de Maloma reitera que se trata de un "matrimonio forzado", en el que ella "no conocía siquiera al que se supone que es su marido".
"SIEMPRE ESTÁ RODEADA"
"Si fuera así, ella ahora sería 'propiedad' del esposo, que decidiría sobre ella en lugar de su hermano, que se erigió en su dueño hace 18 meses y controla su vida hasta el punto de que no podemos hablar con ella si no es a través del teléfono móvil de él", expone. Así, José Morales recuerda que Maloma "nunca" está "libre" o "sola". "Siempre está rodeada", advierte.
Al respecto, razona que si la familia biológica de Maloma defiende que la joven goza de libertad, lo más justo es que permita que la muchacha pueda "ejercer sus derechos" y expresar "libremente" cuál es su voluntad en la embajada española de Argel, "con todas las garantías de seguridad y de respeto a su decisión".
"¿Qué tiene que pasarle a Maloma para que se aborde su secuestro como un problema de Estado, como una cuestión de Derechos Humanos, que ha sido denunciada hasta por el ex secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon?", pregunta retóricamente José Morales.
EL "MOTOR" DE LA LIBERTAD
En ese sentido, el padre adoptivo de Maloma no ve "descabellado" que la familia biológica de la joven esté utilizándola para obtener "un rescate". "Si el dinero es el motor que impulsará su libertad, que el Gobierno pague como ha hecho en los demás casos de ciudadanos españoles secuestrados", considera José Morales.
Al respecto, avisa en paralelo de que "la tribu y la familia biológica han convertido el secuestro de Maloma en una cuestión de honor nacional", lo que le lleva a poner de manifiesto que Maloma "no regresará" a España si no es a través de "una presión política decidida y contundente".
