Agentes de la Policía Nacional han detenido en Sevilla a un hombre de 35 años de edad que contactó a través de Internet con más de 140 menores tras hacerse pasar por una niña de 13 años en una conocida red social de Internet, hechos por los que la autoridad judicial ha ordenado su ingreso en prisión, según ha informado la Policía en un comunicado de prensa.
El detenido pedía en un primer momento amistad a los menores para posteriormente solicitar fotografías y vídeos de contenido sexual, de forma que, para tratar de convencerlos, el arrestado llegó a enviar vídeos donde se veía a una menor masturbándose.
Tras ganarse su confianza, el arrestado intentaba quedar con sus víctimas para practicar sexo, bien de forma voluntaria o mediante amenazas de hacer públicas las fotos o vídeos que ya tenía de ellos.
La investigación se inició el 5 de noviembre gracias a la primera denuncia presentada por el padre de un menor, quien aseguró que su hijo había sido engañado por el usuario de un perfil de una conocida red social que, tras simular ser una niña de 13 años, le solicitó fotos de carácter íntimo y seguir el contacto a través de una aplicación de mensajería instantánea en el teléfono móvil.
A esta denuncia le sucedió una segunda días más tarde, en la que el padre de otro chico de 12 años de edad manifestó que el usuario de una red social, siguiendo el mismo modo de actuar que en la otra denuncia, estaba incitando a su hijo a que le enviara fotos de índole sexual.
Tras analizar las denuncias, los agentes pudieron determinar que el arrestado se valía de perfiles falsos en las redes sociales más populares entre los adolescentes para captar a sus víctimas y después solicitarles archivos de carácter sexual.
LA MAYORÍA DE LAS VÍCTIMAS RESIDEN EN SEVILLA CAPITAL
Las primeras diligencias permitieron averiguar que, tras el perfil investigado en las dos denuncias, y que supuestamente correspondía a una adolescente, se encontraba un adulto residente en Sevilla con antecedentes policiales por delitos similares, momento en el que se puso en marcha un operativo para su localización y detención.
Finalmente, los agentes le localizaron y detuvieron cuando se encontraba paseando en las inmediaciones de su domicilio; en su poder llevaba un teléfono móvil que fue intervenido y en el que, tras un primer análisis, se ha podido determinar que contactó con al menos 140 menores.
Actualmente, el terminal está siendo sometido a un examen más minucioso para identificar a todas las posibles víctimas.
La conducta del arrestado se encaja en una tipología delictiva que se define como 'child-grooming' y que se define como el conjunto de estrategias que una persona adulta desarrolla para ganarse la confianza de una menor a través de Internet con el último fin de obtener concesiones de índole sexual.
Los autores usan primero un acercamiento lleno de engaños y, posteriormente, comienzan el chantaje para obtener imágenes comprometidas de la víctima menor de edad. En casos extremos, los autores pretenden un encuentro en persona para lo que coaccionan y acosan a los menores para lograr su propósito.