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Sevilla

Un docente sevillano invierte entre 2 y 8 años en sacar su plaza

Una encuesta del sindicato CSIF revela que la mayoría de los opositores cree que la carga burocrática del proceso de oposición es "intensa o desproporcionada"

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  • Oposiciones. -

La encuesta de marzo del Sector de Educación de Csif Sevilla revela que un docente funcionario estudia entre dos y ocho años en sacar su plaza en el proceso de oposición y que una amplía mayoría de los mismos considera que la carga burocrática es "intensa y desproporcionada".

Estos datos, según el sindicato, son interesantes tanto para los docentes interinos como los que ya son funcionarios de carrera, ya que, por un lado, queda patente que los años que han dedicado los ya funcionarios docentes y los que siguen dedicando los interinos se acerca a la década como media.

Por un lado los ya funcionarios de carrera han dedicado entre 2 y 4 procesos selectivos a sacar plaza, siendo estos cada dos años para cada uno de los Cuerpos, hace un total de entre 4 y 8 años los inmersos en el estudio de las oposiciones. Cifra que se iguala, incluso se amplía para los docentes interinos que aún no han conseguido plaza, resaltan desde CSIF.

Para Daniel Bermúdez, responsable del Sector de Educación de Csif Sevilla, “esto significa que tanto el profesorado funcionario de carrera como el interino es un profesorado que garantiza la calidad de la Educación ya que ha demostrado y sigue demostrando año a año, convocatoria tras convocatoria, que posee los conocimientos y las aptitudes para desempeñar su trabajo. Por ello, es de justicia que le sea tenida muy en cuenta su experiencia docente en el baremo del concuros-oposición”.

Por otro lado, de la encuesta destaca la abrumadora mayoría que pide que se desarrolle un Estatuto Docente como marco o fórmula jurídica que regule, además de los derechos y los deberes del profesorado, sus condiciones laborales. Además de la opinión mayoritaria del exceso de carga burocrática que impide al profesor dedicar el tiempo deseado a la planificación y confección de las clases, según Daniel Bermúdez.

El descontento es generalizado también al notar los docentes una pérdida de poder adquisitivo en los últimos años, y al no sentirse valorados económicamente al 100% en cuanto a sus retribuciones.

Por último, la encuesta marca también una nueva reivindicación, o al menos reciente, y es la denuncia por la falta de personal de administración y servicios en todas sus facetas. Según Daniel Bermúdez, “los centros educativos, y sobre todo los colegios de Educación Infantil y Primaria, son las únicas dependencias de la Administración en las no se dota, ni se tiene pensado hacerlo, con el PAS necesario para las necesidades que existen. No es normal que en los colegios, salvo que los pongan los ayuntamientos, no haya nadie para abrir y cerrar la puerta a padres o proveedores que vengan a alguna gestión al centro. En multitud de ocasiones son los mismos maestros los que dejan de dar clase para abrir las puertas. O, ¿se imaginan algún tipo de evento que tuviera lugar diariamente con entre 300 y 600 niños presentes sin ningún sanitario? Pues esto ocurre a diario en los colegios. Ni siquiera un enfermero”.

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