El 95 por ciento de los incendios forestales que se producen en verano en España se deben a la acción humana, más concretamente a descuidos o despistes, imprudencias, falta de atención, irresponsabilidad o conductas pirómanas, según ha recordado el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.
El Departamento que dirige Isabel García Tejerina ha recordado que todos los años el Ejecutivo destina a la extinción de incendios "ingentes recursos económicos, materiales y humanos", por lo que considera "vital la concienciación de la sociedad en la prudencia y prevención de determinadas actitudes que pueden provocar incendios".
"La mejor extinción de un fuego es la que no se necesita", ha manifestado el Ministerio, al tiempo que ha destacado una serie de recomendaciones para extremar las precauciones a la hora de realizar actividades susceptibles de provocar los incendios.
De este modo, el Medio Ambiente recuerda que en las excursiones y acampadas no se deben tirar colillas encendidas al suelo ni arrojar o dejar basuras fuera de las papeleras, ya que determinados residuos pueden favorecer el inicio de un incendio. Además, las hogueras sólo pueden prenderse en zonas y épocas autorizadas, y es recomendable no dejar lámparas encendidas al ausentarse del campamento.
Asimismo, si se viaja en un vehículo, el Ministerio recuerda que está prohibido tirar colillas por la ventanilla u otros objetos que puedan servir de combustible al fuego.
Ante un incendio, se debe avisar y pedir ayuda al 112. En caso verse amenazado por el fuego, se recomienda intentar bordearlo y huir rápidamente, procurando no subir por la montaña, ya que el fuego avanza más rápidamente que las personas. Lo más conveniente es no cargar con más cosas de las que realmente son necesarias.
EN LAS ACTIVIDADES AGRARIAS
Por otra parte, dentro de las viviendas, es conveniente instalar matachispas en las chimeneas y evitar en los jardines la excesiva frondosidad y vegetación seca. Asimismo, es importante mantener siempre limpios los tejados y las chimeneas.
En las proximidades de zonas forestales y en épocas de riesgo, no se deben emplear motosierras, desbrozadoras, soldadores, sierras radiales o herramientas que puedan provocar chispas y, por lo tanto, incendios.
Sobre la quema de rastrojos, el Ministerio recuerda que se debe solicitar la autorización necesaria y, en todo caso, evitarlas en días de viento fuerte o de sequía. Si se realiza esta actividad, se debe vigilar la quema y no abandonarla hasta no estar seguro de que esté totalmente apagada. También se debe solicitar autorización en las quemas para la limpieza de los montes, que sólo se podrán realizar en los periodos autorizados y nunca en días de viento o sequía.
Por último, si un ciudadano participa en la extinción de un incendio forestal, se recomienda no trabajar nunca aislado; ponerse siempre a las órdenes de la autoridad competente; protegerse y alejarse de la trayectoria de los aviones que arrojan agua y no mojar los cables eléctricos.