La modificación de la Ordenanza Fiscal número 23, Reguladora de la Tasa del Servicio de Agua, con la aplicación de un incremento en la misma idéntico al experimentado por el Indice de Precios al Consumo (IPC), concretamente un 3,4 por ciento, y la decisión, con el voto a favor del Grupo Municipal del Partido Popular, de que Torremolinos cause baja inmediata en la Federación Andaluza de Municipios y Provincial (FAMP), por entenderse que dicho organismo actualmente “no cumple los objetivos de defensa de la autonomía local que figuran en sus estatutos sino que, por el contrario, se pliega a los intereses de aquellas administraciones que gobierna el PSOE”, son los dos asuntos más destacados abordados hoy en la sesión plenaria de la Corporación presidida esta mañana por el alcalde, Pedro Fernández Montes.
El incremento de la tasa del agua suscitó el debate más intenso, en el que el portavoz de IU, Félix Martín, criticó los beneficios de la empresa ASTOSAM y se manifestó una vez más contrario a la subvención prevista por el Equipo de Gobierno para minimizar el incremento, mientras que el portavoz socialista insistió en la difícil coyuntura económica actual y, por tanto, la inoportunidad, a su juicio, de la medida, oponiéndose también a la exigencia de que los vecinos en situación de paro, a la hora de beneficiarse de la subvención prevista, tengan que justificar tal condición cada tres meses, en vez de solo una vez al año como ocurría en la modificación anterior de esta misma Ordenanza.
Con la crisis como telón de fondo del debate, el alcalde, Pedro Fernández Montes, tras explicar que se pretende que quienes dejan de estar en paro afronten como los demás ciudadanos sus obligaciones, y para ello es lógico aplicar un criterio de información trimestral, en vez de anual, apeló a la concreción para evitar la confusión ciudadana y, tras significar que la subida del agua aprobada es idéntica al crecimiento del IPC (3,4 por ciento), apuntó la conveniencia de “hacer la cuenta de la vieja”, en el sentido de aclarar con todo detalle a los ciudadanos la incidencia real que va a tener en sus bolsillos esta modificación.
Así, el primer edil explicó que la tasa se abona en función de la pertenencia a uno de los cuatros bloques de conusmo establecidos, dejando sentado que el 76 por ciento de los ciudadanos de Torremolinos se ven inmersos en alguno de los dos primeros bloques, referidos respectivamente a consumos de entre 0 y 6 metros cúbicos, que afecta al 23 por ciento de los abonados, y entre 7 y 30 metros cúbicos de consumo, que afecta al 53 por ciento de los vecinos.
Sentado lo anterior, el alcalde calificó de “moderada” la subida, teniendo en cuenta que el aumento real efectivo trimestral que deberán afrontar ambos grupos de vecinos será, en cuanto a los encuadrados en el primer bloque de consumo, de 0,41 céntimos al trimestre (14 céntimos al mes), mientras que los encuadrados en el segundo bloque verán incrementado el recibo en 0,91 euros al trimestre (30 céntimos al mes).
En cuanto a los vecinos pertenecientes al tercer bloque (consumo de entre 31 y 54 metros cúbicos), que suponen el 11 por ciento del total, la subida será de 1,91 euros (0,64 euros al mes), mientras que para los encuadrados en el último tramo de consumo (los grandes consumidores), el incremento será de 3,45 euros al trimestre, es decir 1,15 euros al mes.
Pedro Fernández Montes se dirigió a la oposición para pedirle la misma atención que dedican al análisis del incremento de los recibos a la contemplación del denominado “Canon Autonómico”, “ese impuesto disfrazado –dijo- que se sacó el Partido Socialista de la Junta de Andalucía”, del que significó que “a las personas que se les sube el recibo en 0,41 euros el trimestre la Junta de Andalucía le ha incrementado por ese concepto 3,30 euros (+ 18 por ciento), y a las que se sube 0,91 euros al trimestre el Canon Autonómico se les incrementa en 3,92 euros (+ 10 por ciento)”.
Abundando en los datos, el primer edil detalló que los abonados inmersos en el tercer bloque de consumo verán incrementado el Canon Autonómico en un 7,6 por ciento y, por fin, los del último bloque, verán aumentado el mismo concepto en un 7 por ciento, significando también el hecho de que “el Canon no tenga en cuenta a los pensionistas, que aquí, en Torremolinos, siguen obteniendo un descuento del 90 por ciento en el consumo de agua”.
“Ustedes, los socialistas –afirmó el alcalde- tienen la boca seca de decir que pague más el que más tiene, y de hecho es así en España, pero en el Canon Autonómico el Partido Socialista aplica que pague más en que menos tiene”, recordando la “injusticia” en la que, a su juicio, incurre el Gobierno Autonómico cuando obliga al Ayuntamiento a que le abone la cantidad correspondiente a la facturación, y no lo recaudado de forma efectiva, y después de explicar que los vecinos de Torremolinos abonarán por este concepto el próximo año más de 800.000 euros a la Junta de Andalucía, recordó que el Partido Popular presentó en su momento un recurso de inconstitucionalidad contra el referido Canon.
En este contexto, el Pleno aprobó también, esta vez con los votos a favor del PP y PSOE, y en contra de IU, la correspondiente subvención promovida por el Equipo de Gobierno en lo que respecta a la referida Ordenanza número 23, a la que podrán acogerse todos los empadronados con una antigüedad mínima de dos años, cuya cuantía será de 4,6808 euros al trimestre para los abonados con calibre de suministro de hasta 15 milímetros, y de 5,4717 euros trimestrales, para los usuarios con calibre de suministro de hasta 20 milímetros.
Torremolinos, baja en la FAMP
Torremolinos dejará de pertenecer a la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), en cumplimiento del mandato plenario dictado en la seisón de hoy y en orden a la probación de una Moción en la sentido presentada por el Partido Popular.
En dicha moción, el Grupo que sustenta al Equipo de Gobierno explica que “el PP ganó las elecciones municipales del 22 de mayo de 2011 con un 39’36% de los votos, frente al 32’22% del PSOE, es decir, con más de siete puntos de ventaja. Obtuvo 1.600.000 votos, la cifra más alta alcanzada nunca por un partido en unas elecciones municipales en nuestra Comunidad, y logró una ventaja sobre el PSOE de 300.000 voto”, así como que “el 65% de los andaluces vive en ciudades gobernadas por el PP, mientras que sólo el 25% vive en ciudades gobernadas por el PSOE. El PP gobierna las ocho capitales de provincia; cinco de las ocho Diputaciones Provinciales; 22 de las 25 ciudades mayores de Andalucía”, y entiende por todo ello que “cualquier planteamiento basado en la razón, en la justicia y en el respeto a la democracia, concluiría que todo lo anterior es motivo más que suficiente para que la entidad que se supone que agrupa al municipalismo andaluz esté presidida por un alcalde del PP, como de hecho sucedió, a nivel nacional, en la Federación Española de Municipios y Provincias, al igual que en el resto de federaciones de ámbito autonómico, que están presididas por un Alcalde del partido político que ganó las elecciones municipales. Sin embargo, desde ese mismo 22 de mayo, asistimos en la Federación Andaluza de Municipios y Provincias a una sucesión de cambios de reglas antiestatutarios de toda índole para hurtar la voluntad de los ciudadanos, la decisión soberana expresada libremente en las urnas y su correlación lógica en la composición de los órganos de gobierno de la FAMP. Todas estas triquiñuelas han sido llevadas a los tribunales por Ayuntamientos gobernados por el PP y asociados a la FAMP”
Según el texto literal de la Moción aprobada hoy, “de nada ha servido el reiterado ofrecimiento de los dirigentes andaluces del PP a los del PSOE para llegar a un acuerdo de gobierno compartido de la FAMP sobre la base de los resultados electorales: el PSOE ha seguido obcecado con mantener, por encima de todo, el sillón de la presidencia en la Federación”, considerando también que “sin duda en esta obsesión tiene mucho que ver el uso que durante todos estos años le ha dado el PSOE a la FAMP: en vez de entenderla como un instrumento al servicio de los Ayuntamientos y las Diputaciones, la ha utilizado como barrera ante las reivindicaciones municipalistas de los Ayuntamientos a la Junta de Andalucía, frenando cualquier crítica a las administraciones socialistas, y atacando a las que no gobierna el PSOE”.
Por todo ello, el Partido Popular considera que “la FAMP no cumple por tanto los objetivos de defensa de la autonomía local que figuran en sus estatutos, sino que, por el contrario, se pliega a los intereses de aquellas administraciones que gobierna el PSOE”, por lo que aprobó que el Ayuntamiento de Torremolinos eleve a los órganos competentes de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias su decisión de causar baja inmediata en dicha Federación, así como “trasladar este acuerdo a la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, y a la Federación Española de Municipios y Provincias”.
