El Valencia Basket recibirá este jueves en su último encuentro de esta temporada de la Euroliga en la Fonteta al Virtus Bolonia y lo hará ya sin opciones de clasificarse para los cuartos de final de la competición y más pendiente de usar el partido para preparar el tramo final de la Liga Endesa, en el que debe atar su presencia en las eliminatorias por el título y tratar de mejorar su posición.
Tras ganar al Fenerbahce hace ahora apenas dos semanas, el equipo de Álex Mumbrú parecía dispuesto a pelear hasta el final por estar en esa siguiente fase de la competición, pero en el momento clave ha encadenado tres dolorosas derrotas en las pistas del AS Mónaco, el Estrella Roja y el Zalgiris Kaunas que le han dejado sin posibilidades.
La mala imagen ofrecida en las dos primeras y en parte de la tercera y el hecho de haberle añadido otras dos derrotas en la ACB, con mal juego en la cancha del Zaragoza y con mejor presencia ante el Baskonia, ha hecho crecer de nuevo las dudas sobre el juego del equipo.
En cualquier caso, en ese último choque ante el conjunto alavés, el equipo fue capaz de complicarle mucho las cosas con una defensa mucho más agresiva sobre la pelota, que le permitió correr en muchos momentos y que le hizo menos dependiente de las individualidades de sus exteriores en ataque.
El técnico Álex Mumbrú ya ha avisado que será más exigente ahora con la energía y que quiere que el juego del equipo sea mucho más enérgico, especialmente en defensa.
El choque de este jueves debe servir al Valencia para preparar la importante visita del domingo al Joventut en la competición doméstica. En ese sentido, se da por hecho que Mumbrú protegerá a jugadores que tengan molestias, bien reduciendo sus minutos o incluso evitando que jueguen si puede hacerlo.
Enfrente tendrá a un rival que llega a estas dos últimas jornadas en la misma situación. De hecho, el equipo que dirige Sergio Scariolo tiene trece triunfos, una victoria menos que el Valencia. Si ganan los locales se asegurarán quedar por delante en la fase regular mientras que si lo hacen los visitantes les adelantarán a falta de lo que pase en la última jornada.
Para este choque son baja segura en el Valencia Sam Van Rossom, Klemen Prepelic y Bojan Dubljevic y el técnico deberá hacer un descarte de los trece jugadores que tiene disponibles y entre los que ya está Millán Jiménez, casi cuatro meses después de haber sido operado del tobillo izquierdo.
