El nuevo delegado municipal de Urbanismo, José Ortiz, se ha marcado como uno de sus principales objetivos dentro de las actuaciones a realizar en el casco urbano el control y la mejora de las viviendas y solares en mal estado de conservación o en ruinas. En este sentido ya se está elaborando un inventario con los inmuebles en los que es necesario actuar y se solicitará a los propietarios que ejecuten las mejoras pertinentes, prestando la colaboración municipal en casos de especiales dificultades económicas, o incluso iniciando expedientes de expropiación de aquellas parcelas o inmuebles cuyos propietarios no quieran hacerse cargo.
Trabajando en esta senda se va a proceder a la expropiación de la primera de estas construcciones en ruina. Se trata de una casa ubicada en la plaza Manzanares cuyo expediente ya estaba abierto. Ortiz explica que esta parcela se encuentra catalogada como especialmente protegida en el Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Casco Histórico (PEPRICH). “En este caso concreto el propietario ha aceptado la expropiación de la parcela ya que por su catalogación en el PEPRICH tarde o temprano tendrá que llevarse a cabo este procedimiento. Por ello, hemos acordado de mutuo acuerdo valorar el justiprecio de este inmueble que pasará a convertirse en propiedad municipal”, ha explicado el delegado de Urbanismo.
En cuanto al uso que se dará a este nuevo espacio público una vez se proceda al derribo de la vivienda, que se realizará en las próximas semanas, se ha previsto el traslado allí del parque infantil que actualmente se encuentra ubicado en la plaza Manzanares. La zona que actualmente ocupa el parque se destinará a aparcamientos.