Según explica Mayoral “hay un gran número de subvenciones de carácter finalista que se dieron al Ayuntamiento como para la obra de la zona de San Enrique, en la que se recibió unos 600.000 euros pero que ha tenido que pararse porque no se pagaba al constructor, ya que se utilizaron 400.000 euros para otros fines y ese dinero ahora hay que reponerlo a las arcas municipales”.
“El pabellón deportivo también recibió una subvención my importante por parte de Diputación y tampoco se ha gastado en ello. Lo mismo ocurre con el resto de ayudas y eso hay que sumarlo a la deuda municipal porque ese dinero no está como directamente como deuda pero hay que reponerlo, al igual que ocurre también con el dinero recibido por parte de la Junta de Andalucía para los programas sociales y de formación que se ha destinado a otras cosas. La liquidación del 2008 va a ser catastrófica”, dijo Mayoral.
No obstante, el portavoz del PIVG se muestra convencido de que todos los ingresos que se han puesto en el presupuesto municipal “no se van a poder recaudar”, aunque afirma que, aún así, “no habrá problema para el pago de las nóminas”.