El descubrimiento de una placa conmemorativa por parte de don Felipe de Borbón y doña Letizia, en presencia del lehendakari, Patxi López, la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, y la presidenta del Parlamento Vasco, Arantza Quiroga, ha servido para dar por iniciada oficialmente la actividad de esta nueva facultad, ubicada en un innovador edificio con forma de pila de platos. Al acto no acudió la máxima autoridad institucional de Gipuzkoa, el diputado general, Martín Garitano, ni el alcalde de la ciudad, Juan Karlos Izagirre, ambos de Bildu, quienes consideran que los príncipes constituyen un símbolo de la “negación del pueblo vasco”.
Sin embargo, la ceremonia sí ha contado con la presencia de otros representantes institucionales, como el diputado general de Álava, Javier de Andrés, y el delegado del Gobierno en el País Vasco, Mikel Cabieces; los consejeros del Gobierno Vasco, Isael Celaá e Iñaki Arriola, además de representantes políticos del PP vasco como su presidente, Antonio Basagoiti, el juntero del PNV Markel Olano o los ediles donostiarras Ernesto Gasco (PSE/EE) y Eneko Goia (PNV).
Momentos antes del acto inaugural, los príncipes recorrieron las instalaciones de este nuevo centro de estudios superiores, gestionado por la Universidad de Mondragón, cuyo itinerario pedagógico está homologado con el Plan Bolonia y al que en un primer momento se incorporarán 56 alumnos seleccionados entre 320 aspirantes de distintos países. En todo momento, acompañaron a don Felipe y doña Letizia afamados cocineros como Juan María Arzak, Pedro Subijana, Andoni Luis Aduriz, Hilario Arbelatiz, Eneko Hacha y Martin Berasategui, entre otros.
Tras descubrir la placa junto a doña Letizia, el príncipe felicitó a los asistentes por la inauguración de este nuevo centro y llegó a incluir en su alocución algunas palabras en euskera. Don Felipe destacó que el BCC es “fruto de la colaboración” del Ayuntamiento de San Sebastián, la Diputación de Gipuzkoa, el Gobierno Vasco y el de España, lo que significa un motivo de “alegría”, ya que “lo que los ciudadanos piden, tanto en el País Vasco como en toda España” es que “las instituciones cooperen, trabajen juntas y de manera coordinada y unan esfuerzos en proyectos de interés general, en beneficio del conjunto de nuestro país”.
Asimismo, lanzó un mensaje de optimismo, basado en las palabras que ha escuchado en la visita al centro y que definen a la nueva facultad: “formación, investigación, tecnología, innovación, conocimiento, proyección internacional”. “Compartiréis conmigo que esas palabras señalan uno de los caminos que debemos seguir para salir de la crisis y no nos cansaremos de repetirlo”, resaltó el príncipe, quien reconoció “el impulso a este gran proyecto de la Universidad de Mondragón”.