La transición en la configuración o estructura del túnel del metro de Málaga que discurre entre la estación Guadalmedina y la estación Atarazanas constituye una de las operaciones de ingeniería más singulares de la obra del suburbano, que acomete la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, a través de la Agencia de Obra Pública.
Esta operación posibilita el encaje de la solución C Plus del metro de Málaga, diseñada para facilitar un trasbordo ágil y cómodo de los usuarios entre ambas líneas en el tramo común de las L1 y L2 que discurre desde la Calle Mendivil --justo antes de la Estación El Perchel-- y hasta poco antes del Puente de Tetuán, con dos túneles superpuestos, lo que implica la construcción de 3 niveles subterráneos (primer nivel correspondiente a vestíbulos o espacio interestaciones, segundo nivel correspondiente al anden -1 y tercer y último nivel correspondiente al andén -2).
Así, según han precisado desde la Junta en un comunicado, con esta solución CPlus, los usuarios del metro podrán combinar la línea 1 y la línea 2 sin bajar o subir de andén, ya que en el mismo nivel coexisten líneas 1 y línea 2 (en una y otra vía), sólo que con diferente dirección o sentido dependiendo del nivel por el que transita el tren.
Pero la estructura del túnel correspondiente al tramo Guadalmedina-Atarazanas, una vez cruzado el cauce del Río Guadalmedina, ya es la clásica o convencional, como en el resto del trazado del suburbano, pues se define con un primer nivel correspondiente a vestíbulo (en este caso de la estación Atarazanas) y un segundo último nivel correspondiente al andén de la estación término (Atarazanas).
La continuidad entre las diferentes estructuras de túnel se logra con la ejecución de unos toboganes en la recta final del túnel bajo la avenida de Andalucía, que permite esa modificación o transición gradual entre la sección de tres niveles y la sección de dos niveles subterráneos.