Apenas una persona fue condenada en España el año pasado por cometer un delito de tráfico de influencias, según las estadísticas de condenados correspondientes al año 2013 del Instituto Nacional de Estadística (INE), recogido por Europa Press. De este modo, la cifra de condenas por este delito es la misma que la de personas condenadas por genocidio, también una.
El delito de tráfico de influencias se encuentra incluido en la categoría de delitos contra la Administración Pública donde se especifica también que un total de 51 personas fueron condenadas por el delito de cohecho.
Por cometer un delito de malversación fueron condenadas 89 personas, 541 por la comisión de delito de insolvencia punible y 67 personas por alteración de precios en concursos y subastas públicas.
En cuanto a los delitos contra la Constitución fueron condenados un total de 217 personas, de las cuales uno fue condenado por cometer un delito contra la Corona y 73 por delitos contra las Instituciones del Estado.
Por su parte, en relación con el terrorismo y el crimen organizado, fueron condenadas un total de 133 personas por integraciones en organizaciones criminales y 45 personas integrar grupos terroristas o cometer delitos terroristas, según estas mismas estadísticas.